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Cable aéreo a Ciudad Bolívar: empiezan obras tras ocho años de espera

En medio de retrasos, ajustes de diseño e, incluso, denuncias de corrupción, ayer empezaron oficialmente las obras. El sistema conectará los barrios altos de la localidad con el portal El Tunal.

Redacción Bogotá
13 de septiembre de 2016 - 03:00 a. m.
Cortesía IDÚ.
Cortesía IDÚ.

Un habitante de los barrios altos de Ciudad Bolívar puede tardar una hora en llegar a su casa, desde el portal de El Tunal, debido a la falta de un sistema de transporte adecuado. Volar por encima de los trancones es una solución de la que se viene hablando desde hace ocho años para reducir el viaje a 13 minutos. Luego de retrasos, incumplimientos y hasta denuncias de corrupción, ayer empezaron oficialmente las obras.

2008
Se empieza a hablar de la idea del cable desde los barrios altos hasta Transmilenio, para solucionar los problemas de movilidad de más de un millón de personas. La idea inicial era que partiera de los barrios Sierra Morena, Paraíso y Bella Flor.

2009
El alcalde Samuel Moreno anunció que, a finales de enero, presentaría el estudio del proyecto. “Será un proyecto incluyente con las zonas más marginales”. Se hablaba de 3.000 pasajeros hora sentido, en cabinas para 20 personas y un costo de $120.000 millones.

2012
En la alcaldía de Gustavo Petro tomó forma la idea. El secretario de Hacienda, Ricardo Bonilla, dijo que la obra se haría con un préstamo de US $40 millones, que el Gobierno recibiría del Banco Mundial, destinado para proyectos de tecnologías limpias. Ya había estudios de prefactibilidad.

2013
El Distrito firmó un convenio con Metro de Medellín, por $3.967 millones, destinados hacer los estudios técnicos del cable de Ciudad Bolívar. Por primera vez se anunció fecha para el inicio de obras: junio de 2014, con lo que estaría operando a mediados de 2015. Se indicó que los recorridos se reducirían de una hora, en buses y busetas, a 13,5 minutos con el cable aéreo. El costo de la obra aumentó a $130.000 millones.

2014
En octubre, el IDÚ anunció la apertura de la licitación. La firma ganadora adelantaría estudios, diseños, obras y puesta en funcionamiento del sistema, en 20 meses. El costo ya era de $164.400 millones. Se dijo que la obra debía estar lista en junio de 2016, con la que se beneficiarían 200.000 personas. El cable tendría una demanda de 3.500 personas por hora. En diciembre, cambiaron unas condiciones. La administración dijo que el contratista tendría 35 meses para terminar el trabajo y el cable estaría listo en el primer trimestre de 2017.

2015
Marzo: El IDÚ dijo que, en abril, cerraba el plazo para que los interesados presentaran sus propuestas; en mayo, adjudicaría el contrato y, antes de terminar el año, debía empezar la obra de 3,3 km de longitud; cuatro estaciones entre El Tunal y El Paraíso; capacidad para 3.600 pasajeros por hora; 160 cabinas. El costo: $164.400 millones. Una vez adjudicado, el contratista tendría cinco meses para estudios, diseños y aprobaciones; un mes para los preliminares, y 17 meses para las obras civiles.
Mayo: Luego de precisar el anexo técnico, tres grupos quedaron habilitados para competir por el contrato.
Junio: El IDU adjudicó el contrato a la UT Cable de Bogotá, integrada por Doppelmayr Colombia SAS, Constructora Colpatria, S. A. e Icein Ingenieros Constructores SAS. Según el IDU, primó la propuesta técnica y económica.
Septiembre: Tras la adjudicación, el proceso fue salpicado por una denuncia de posible corrupción, que hizo el propio exsecretario de Movilidad de Petro, Rafael Rodríguez, quien entregó a un fiscal la denuncia de un exempleado de Doppelmayr, quien dijo haber conocido los trámites que llevaron al posible direccionamiento del contrato. Señaló a Petro, a su esposa, a directivos del IDU y Transmilenio, a empleados de la empresa que ganó el contrato y hasta el presidente de Bolivia, Evo Morales, de haber incidido en este caso. La Fiscalía lo llamó a entrevista. A la fecha, el caso sigue estancado.
Noviembre: El alcalde Gustavo Petro firmó el acta de inicio de las obras. Dijo que los trabajos comenzarían en marzo de 2016. En ese momento, el alcalde indicó que la obra no había comenzado en 2012, porque el Concejo negó los recursos.
Diciembre: La Procuraduría anunció la apertura de investigación por las posibles irregularidades en la adjudicación del contrato.

2016
Marzo: No empezaron obras. La Alcaldía dijo que esto obedecía a la falta de tiempo para ajustar los diseños y la aprobación del interventor.
Julio: La Interventoría aprobó los diseños. Anunciaron el comienzo de obras preliminares. Los trabajos ahora costarán $170.656 millones y estarán terminados en tres años.
Septiembre: El alcalde Enrique Peñalosa anunció oficialmente el comienzo de los trabajos, que durarán casi 21 meses.

 

Por Redacción Bogotá

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