Durante una visita de prevención liderada por la Policía Ambiental de Cundinamarca en compañía de la CAR, fueron capturadas ocho personas en un predio de la vereda Bosatama, zona rural del municipio de Soacha, al ser descubiertas desarrollando quemas a cielo abierto, el pasado viernes 22 de febrero.
Este lunes, la intervención continuó en la vereda Panamá, precisamente donde este fin de semana se presentó un fuerte incendio forestal que dejó 65 hectáreas de montaña consumida, se indentificaron 11 pilas activas y una apagada de carbón vegetal. Por estos hechos, fueron detenidas otras cinco personas.
La profesional especializada de la Dirección Regional Soacha de la CAR, quien realizó el informe de los hallazgos, señaló que “en el proceso de quemas a cielo abierto de madera, se generan varios agentes contaminantes como el monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno, partículas suspendidas totales y material particulado".
Por otro lado, la entidad evidenció que estas personas no realizaban una disposición adecuada de residuos provenientes de la producción de carbón vegetal en el área. "El suelo orgánico se encuentra erosionado y sin vegetación, debido a la actividad directa de las camas de combustión para la obtención del carbón vegetal", agregó.
Además de las afectaciones ambientales a los recursos de aire, suelo y flora, dicen que material particulado, según su tamaño, puede afectar diferentes zonas de la piel y del sistema respiratorio y mucosas donde las partículas con un tamaño menor a 10 micrómetros y superior a 2.5 micrómetros, pueden quedar retenidas en los bronquios o alveolos pulmonares, generando un gran daño en la salud de la personas.
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