Cerros Orientales en Bogotá: ¿botadero de escombros?

Las quebradas El Pilar y El Chuscal, de la localidad San Cristóbal, y el barrio Soratama (Usaquén), son los más afectadas por la inadecuada disposición de residuos mixtos, según se denunció desde el Concejo de Bogotá.

-Redacción Bogotá -bogota@elespectador.com
17 de marzo de 2018 - 02:20 a. m.
Cortesía.
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A pesar de que ya está en marcha el nuevo esquema de aseo en Bogotá, la recolección de los desechos mixtos (escombros) sigue en veremos. Tan es así que el concejal Jorge Torres (Alianza Verde), denunció este viernes que, al no haber nadie encargado de recogerlos, algunos barrios de las localidades de Usaquén y San Cristóbal se están convirtiendo en los nuevos botaderos.

Según el cabildante, durante un recorrido realizado en las localidades de Usaquén y San Cristóbal, se evidenciaron supuestas fallas para darles un destino adecuado a los escombros que se generan en la ciudad, lo que ha afectado zonas ambientales de los Cerros, así como quebradas aledañas. Lo anterior, aseguró Torres, sería una muestra de la falta de planeación del Distrito. 

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“En calles del barrio Soratama, donde paradójicamente está ubicada el aula ecológica de la Secretaría de Ambiente, hay material de construcción puesto allí recientemente (…) También, durante la salida de campo, se revisaron las quebradas ubicadas en los Cerros, específicamente en la localidad de San Cristóbal, como El Pilar y El Chuscal, las cuales presentan graves afectaciones como el desvío de su cauce y los desechos de quienes habitan en sus bordes”, agregó el concejal. 

De acuerdo con Torres, el daño ambiental está afectando también a los cerros tutelares. Recordó además que, de 178 procesos sancionatorios que cursan en la Corporación Autónoma Regional (CAR), 44 obedecen a la disposición inadecuada de basuras y escombros, es decir el 12%.

Adicionalmente, cuestionó a la administración por un presunto ‘olvido’, dado que solo se han invertido $15 mil millones de $146 mil que debían haberse destinado, durante los últimos tres años, al plan de manejo del área de canteras, vegetación natural, pastos, plantaciones de bosques y agricultura de la franja de adecuación, entre otros.

“Esta situación evidencia nuevamente el grave vacío del nuevo esquema de aseo que no contempló qué hacer con los escombros, desechos que los nuevos operadores no recogen por no estar contemplados en los contratos”, expresó el concejal Torres.

 

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