¿Deja su vehículo bajo supervisión de un 'cuidandero' en la calle? Ojo, así roban en Bogotá

¿Es confiable dejar el carro o la moto al cuidado de personas en la calle? Según la Policía de Tránsito de Bogotá, es más riesgoso de lo que se cree. Y no solo por el dilema de que su vehículo termine inmovilizado y en los patios por estacionar en sitios no autorizados, sino porque a estas bahías y parqueaderos improvisados acuden cada vez más bandas organizadas de haladores de carros.

 

De acuerdo con el jefe de la seccional de Tránsito y Transporte de la capital, teniente coronel Germán Jaramillo Wilches, de cada 10 vehículos que son hurtados en Bogotá –tanto motos como carros– nueve son robados en la vía pública, es decir, en espacios y bahías como a las que acuden ciertos conductores por ahorrarse unos pesos.

Para demostrar el riesgo de dejar los vehículos bajo supervisión de ‘cuidanderos’, las autoridades –con cámaras escondidas– llevaron a cabo un revelador ejercicio que puso en evidencia cómo estas personas están más pendientes de recibir el dinero fruto de la ‘vigilancia’, que de quién es el conductor al que autorizan remover el carro o moto.

Los videos grabados por la Policía muestran a dos conductores, en diferentes zonas de la ciudad, que acuden a estos parqueaderos improvisados y dejan su carro al cuidado de terceros. Tras estacionar y alejarse del sitio, en escena aparecen otros sujetos que, haciéndose pasar por dueños, retiran los carros.

Los ‘cuidanderos’ –prestos a recibir unas cuantas monedas o un billete– no se percatan de quién se va a llevar el vehículo y hasta facilitan su salida del sector. Minutos después, al lugar acuden los verdaderos propietarios, desconcertados y visiblemente preocupados, pues su carro ya no está. A pesar de los reclamos ante los ‘cuidanderos’, nadie les responde por su paradero. 

(Video: Estos son los riesgos de dejar el carro al cuidado de terceros en la calle)

“Queremos demostrarles a todos los conductores de motocicletas y vehículos el ato riesgo que corren al dejar expuestos sus vehículos en la vía pública, donde se ha vuelto costumbre que desconocidos se ofrecen a cuidarlos. Hemos demostrado cómo ninguno de ellos se percata de quién deja el vehículo y quién lo retira. Lo único que a ellos les interesa, finalmente, es recoger el dinero que les van a dar por el cuidado”, alerta el jefe de la seccional de Tránsito y Transporte de Bogotá.

Según el teniente coronel Wilches, la principal modalidad de halado en la ciudad durante 2016 se ha registrado en vía pública. Y no solo eso: solo este año, por parquear en sitios prohibidos, las autoridades han impuesto 120.000 comparendos y 26.163 motos y carros han sido inmovilizados.

“El nivel de atención de estas personas (los cuidanderos) está principalmente en la recolección de unas cuantas monedas y en ningún momento se lleva un verdadero control sobre la identificación plena de los conductores”, alerta el uniformado.