Publicidad

Matrimonio entre parejas del mismo sexo nuevamente en la mesa

Angélica Lozano, vocera de la comunidad LGBTI, promueve la ‘besatón’ y critica al procurador Ordóñez.

Camila Zuluaga / Especial para El Espectador
26 de noviembre de 2012 - 10:42 p. m.
Angélica Lozano también es activista  y vocera de la comunidad LGBTI. / Luis Ángel
Angélica Lozano también es activista y vocera de la comunidad LGBTI. / Luis Ángel

Este martes en la Comisión Primera del Senado, se reiniciará la discusión sobre la posible aprobación del matrimonio entre parejas del mismo sexo, que se vio interrumpida la semana pasada por las declaraciones del senador Roberto Gerlein en contra de la comunidad homosexual. La concejal de Bogotá Angélica Lozano, activista y vocera de la comunidad LGBTI, ha promovido una “besatón”. El Espectador habló con ella sobre esta iniciativa.

¿Qué es la ‘besatón’? ¿Por qué decidieron convocarla?

Hoy es la votación del proyecto de ley sobre matrimonio para parejas del mismo sexo. Con la ‘besatón’ queremos hacer presencia, llenos de argumentos, de respeto y con un gesto simbólico de amor, que no distingue si es amor entre heterosexuales o no: ¡un beso!

¿Esta idea surgió a raíz de las declaraciones del senador Gerlein?

La razón es el proyecto de ley, sazonado con las palabras grotescas del senador.

Algunos solicitan al procurador Alejandro Ordóñez que sancione a Gerlein por sus declaraciones. ¿Usted cree que el procurador hará algo?
Mi compromiso está con la igualdad, más que con un personajillo de estos que lleva desde 1968 sentado, devengando ingresos que suman más de $12 mil millones del erario, sólo por salarios, sin hablar de cesantías, pensiones ni primas. Y a estas alturas de la vida hay que contarle que, estando él ahí sentado, cambió la Constitución Política.

Muchos pensarían que las tesis de Ordóñez son similares a las del senador conservador…

Hay una razón adicional para la “besatón” de hoy: la elección del procurador, o mejor, su reelección. El procurador ha escrito libros con sus teorías, diciendo que los homosexuales ejercemos el derecho a la animalidad. Con una persona que ha hecho esa producción literario-científica (risas)…

El senador Gerlein dijo que le preocupaban las relaciones homosexuales entre hombres. Si a usted, como mujer, no la están atacando, ¿por qué decidió meterse en este tema?

Porque esto es una causa de la democracia, no solo porque yo hago parte de la comunidad LGBTI, sino porque este es un tema que convoca a los ciudadanos. Me parece morbosa la fijación del senador Gerlein en asuntos masculinos, y ridícula la valoración sobre el sexo entre mujeres.

¿Usted cree que este proyecto del matrimonio homosexual va a pasar el debate en la Comisión Primera del Senado?

No tengo claras las cuentas de los 19 votos. Lo que sí tengo claro y probado es el discurso de doble moral que hay. Gerlein mismo habla de la dignidad de las personas homosexuales y luego se despacha en unos asuntos que me parecen inoportunos para el debate de la Comisión Primera. ¿Vamos a permitir que se consolide un tratamiento distinto, que somete a otros a injusticias, solo porque aman a uno de su mismo sexo?

Si el problema es la palabra matrimonio, ¿por qué no aceptar que se le llame de otra forma a las uniones homosexuales?

Lo que está en juego no es una palabra. El matrimonio es una institución jurídica que tiene efectos, procedimientos, garantías, derechos y deberes. Es una institución que implica unas realidades. No es solo una palabrita.

Si les dieran los mismos derechos del matrimonio pero con otra palabra, ¿no les es suficiente?

No tiene los mismos significados jurídicos. Si usted se casa en el exterior con su novio, y vuelve al país, tiene unos efectos inmediatos. Una unión civil creada bajo una figura, con un nombre que la creatividad jurídica de los “Gerleines” se invente, no tiene efectos más allá de las fronteras.

Muchos temen que después de la aprobación del matrimonio venga el derecho a la adopción. ¿Están luchando por eso?

El proyecto no trata este tema. También perseguimos adopción de niños, que además tienen derecho a ser adoptados y a tener una familia. Si bien no es materia del proyecto de ley, es un tema de fondo. ¿Quién ha dicho que Gerlein es el idóneo para educar niños y una persona homosexual no?

Algunos argumentan que los niños tienen derecho de tener un papá y una mamá...

El 38% de los niños en Colombia sólo conocen a su mamá, han sido abandonados por sus muy heterosexuales padres. Hay una realidad social diferente de la que habla el Partido Conservador. El 19% de las adolescentes en nuestro país ya están embarazadas o son madres. El senador Andrade hablaba en una entrevista sobre su preocupación por el orden social. ¿Cuál orden social es ese?

Pero no se puede decir que la solución sea aprobar la adopción de menores por parte de parejas del mismo sexo…

Cuando yo le hablo de las cifras no es para decir que la solución es la adopción. Sólo le muestro la realidad. El Partido Conservador dice que la adopción altera el orden social. Muchos de los gloriosos padres heterosexuales abandonan a sus hijos. En Colombia la gente puede adoptar independientemente de su inclinación sexual, de ello hay un caso que se vivió ya en el país. Aquí depende del marrano, perdóneme la expresión. Las dos mamás de Medellín, una de ellas mamá biológica, casada en el exterior con su pareja también colombiana, es un ejemplo. Si esa mamá biológica se muriera, los niños quedarían desprotegidos en su propio país.

Hay quienes piensan que dar la adopción a homosexuales generará niños homosexuales...

Sobre lo que dicen en las iglesias no hablo, porque las respeto profundamente. Yo hablo de las leyes y la Constitución que rigen a 45 millones de colombianos.

¿Una pareja que cría a un niño influirá en sus preferencias?

Tendría que explicarme: ¿por qué tantos homosexuales son hijos de familias heterosexuales? Es la historia del huevo o la gallina. No soy quién para responder: ¿por qué tantos heterosexuales tienen hijos homosexuales?

¿Ustedes, como comunidad homosexual, se sienten perseguidos en Colombia?

Si es una persona como yo, con educación y con derechos, no es perseguida. Pero la realidad no es la mía, es la de miles de colombianos que están en una situación de discriminación cotidiana.

¿La comunidad LGBTI ha montado una persecución contra quienes no están de acuerdo con ellos?

¡Faltaba más! Los pájaros tirándoles a las escopetas. ¿Cuál persecución? ¿Quién tiene cuál Procuraduría para ejercer presión indebida? Ahora es persecución expresar verbalmente un reclamo. Ahora es persecución decirle al senador Gerlein: te pasaste, la Comisión Primera no es para que sueltes tu verborrea.

¿Si el proyecto no pasa en la Comisión Primera cuál es el paso a seguir?

Aquí todo es luchado, cada derecho ha sido luchado, desde la Constitución del 91, y seguiremos por las vías del derecho. Se han entablado toda clase de demandas y se han ganado muchas y perdido otras. Esas son las reglas de juego. Nosotros no somos la Corte Constitucional, dilatando en el caso de las lesbianas de Medellín, que lleva más de un año en el orden del día y lo dilatan y hacen maniobras para ver cuál es el magistrado conservador que va a llegar.

Ya que menciona la Corte Constitucional, ¿tienen temor del “tinte godo” que está tomando?

La Corte dijo que tenían dos años para legislar, los que se cumplen en junio de 2013. Si para esa época no han legislado, ya queda en plena vigencia la protección que hay para familias conformadas por parejas del mismo sexo.

La Corte habla de familia, no de matrimonio.

¡Exacto! La corte fue sinuosa en su sentencia. Dice: si es familia, la tienen que proteger mínimo con lo que rige hoy para una familia; no pueden irse por debajo, no da la palabra. En un país santanderista y leguleyo, ya veremos en junio del otro año qué pasaría. No quiere decir que la Corte tenga que decir algo distinto a lo que ya dijo. Nos enfrentaríamos a un galimatías jurídico, propio de nuestro país leguleyo.

Pero entramos nuevamente a que la Corte no habló de matrimonio. Si el Congreso no legisla, ¿usted cree que podrían solicitar la posibilidad en la Corte?
Habría que intentar otra acción jurídica que, como no somos iguales ante la ley, nos toca estar con un abogado debajo del brazo. Nos toca tener rubro para abogados, porque no tenemos los mismos derechos de cualquier heterosexual.

¿Usted se quiere casar?

Yo quiero tener derecho a decidir si me caso o no. Lo que me duele en el alma es no tener ese derecho. ¿Por qué no puedo tomar esa decisión? ¿Por qué simplemente me la impiden?

¿Quisiera adoptar niños o tener hijos?

Me están dando ganas de ser mamá y quiero hacerlo con respaldo de la ley. Tengo derecho a tener hijos con una pareja.

Sobre el enfrentamiento Petro-Parody

 

A usted le parece que Gina Parody se excedió en sus funciones?

Es absurdo que una consejería presidencial venga a darle órdenes a la Superintendencia. El Estado tiene unas competencias delimitadas. La consejería se excede en Bogotá cuando busca estar por encima de estos entes de regulación, inspección, vigilancia y control.

¿Santos puso a Parody en ese cargo para lanzarla a la Alcaldía?

Lamento si ese es el camino escogido. Tiene plenas capacidades para ser alcaldesa, pero hay que ganar las elecciones. Al dárselas de jefe de las comisiones de regulación se le hace daño a ella.

El 18 de diciembre, cuando la EAAB esté a cargo de las basuras, ¿la ciudad se verá en un caos? 

Creo que las razones del alcalde son muy positivas. Esto se puede lograr mejor por las buenas y en común acuerdo entre el Distrito y los concesionarios. Soy más moderada que el alcalde y creo en la concertación.

 

Por Camila Zuluaga / Especial para El Espectador

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar