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El próximo 11 de enero, Rafael Uribe Noguera tendrá que comparecer ante un juez para que se lleve a cabo la audiencia de acusación por el secuestro, asesinato y la violación de Yuliana Samboní, la menor de siete años que fue hallada muerta en su apartamento. El arquitecto confesó hace dos días que es el responsable del crimen de la menor. (Lea aquí: Lo que viene para Rafael Uribe Noguera, el asesino de Yuliana Samboní)
Sin embargo, este hecho no cambia en absoluto la situación, pues no ha sido formalizada su aceptación de cargos ante un juez y la Fiscalía sostuvo que no le dará ningún beneficio y que tiene más de 100 pruebas para demostrar su responsabilidad y lograr que lo condenen a la pena máxima: 60 años de cárcel.
El proceso está en poder del juzgado 35 penal, donde la Fiscalía tendrá que poner sobre la mesa todo el material probatorio contra Uribe, como lo son los videos de las cámaras de seguridad, las minutas de vigilancia y las pruebas de ADN. El escrito de acusación ya fue radicado este jueves por el ente investigador, pero la audiencia se realizará el próximo año debido a que la otra semana ya inicia la vacancia judicial.
"Como es de conocimiento de la opinión pública el juzgado penal del circuito, en atención a la importancia del tema y priorizando este caso de connotación nacional, señaló de manera inmediata y respetando los términos del marco legal, fecha para la audiencia el día 11 de enero próximo", aseguró la Judicatura.
La Fiscalía anunció el lunes que cuenta con todas las evidencias para acusar a Uribe. Luis González, directivo del ente acusador, detalló que las "pruebas científicas, criminalísticas" han sido especialmente importantes para armar el caso contra el hombre de 38 años y quien se encuentra en prisión preventiva.
Precisamente el director de Medicina Legal, Carlos Valdés, informó que el instituto "encontró material biológico que vincula al señor Rafael Uribe en la muerte y abuso sexual de la menor de siete años". El procesado es señalado de haberse llevado a la niña el 4 de diciembre del barrio Bosque Calderón hasta un apartamento de su propiedad, donde fue encontrado el cadáver de la menor.
El pasado viernes, Fernando Merchán, el vigilante que estaba de turno en el edificio donde ocurrió el crimen, fue hallado muerto en su casa. Según Medicina Legal, se trató de suicidio.