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Uno de los proyectos urbanísticos que adelanta la administración distrital está contemplado en los predios de la antigua fábrica de Bavaria, ubicados en la localidad de Kennedy, suroccidente de Bogotá. Allí, desde finales de la década de 1960 hasta 2010 operó la planta que producía y embotellaba casi toda la cerveza y malta que tomaban los bogotanos. Luego del traslado de la planta a las afueras de la ciudad, el alcalde Enrique Peñalosa anunció en junio de 2017 un proyecto para construir más de 12.000 viviendas en esos predios.
Desde entonces, residentes de barrios como Marsella, Villa Alsacia, Aloha, Techo, Bavaria y San José de Bavaria manifestaron su preocupación, no por los planes de urbanización, sino porque eso implicaría la tala del bosque que fue plantado en los alrededores de la fábrica, con el que se aisló el ruido y contaminación de la planta hacia los vecinos. En el bosque hay unos 25.000 árboles (según la Alcaldía solo se talarán 3.000) y, por eso, los habitantes de la zona lo consideran vital, pese a que siempre ha estado en propiedad privada.
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Las preocupaciones de la comunidad han sido llevadas ante diferentes escenarios. Debates en el Concejo, plantones, acciones populares y foros, han dado a conocer el debate alrededor del plan en el predio de Bavaria. Como uno más de esos escenarios, la comunidad de la zona citó a una audiencia pública, en la que los vecinos querían escuchar a funcionarios de la Alcaldía, a quienes invitaron para resolver dudas que siguen teniendo sobre el plan.
No obstante, dicen los promotores de la reunión, los funcionarios del Distrito los dejaron plantados. A la reunión solo asistieron, además de los vecinos interesados, delegados de la Personería, ambientalistas, la concejal María Fernanda Rojas (Alianza Verde), y representantes de los cabildantes Manuel Sarmiento, Celio Nieves (Polo Democrático), Juan Carlos Flórez (ASI), y la congresista Katherine Miranda (Alianza Verde).
La principal preocupación de los vecinos son los índices de contaminación en la zona, que la hacen una de las ciudades con peor calidad del aire de Bogotá. De acuerdo con el informe anual de calidad del aire, la estación que mide la polución de Kennedy registró en 2017 a la localidad como la segunda más contaminada de la ciudad, solo por debajo de la estación Sevillana, en la salida sur de la capital.
Kennedy la localidad con el aire más contaminado de la ciudad, merece la conservación del Bosque Bavaria #SalvemosElBosqueBavaria @MaFeRojas @karenangarita23 @CiudadTintal @SandraC89120322 @danielbernalb @jairoenriqueri2 pic.twitter.com/oGYjHsiE0J
— Fernando Rincón (@luisferincon) November 17, 2018
Agradezco a @PolucionBogota por acompañar la audiencia #SalvemosElBosqueBavaria y a la veeduría ciudadana por la invitación. La administración distrital decide NO asistir, ese es el talante del gobierno frente a la participación ciudadana. pic.twitter.com/pLzDxpveCq
— Mafe Rojas🌻💦🌱🐾 (@maferojas) November 17, 2018
De acuerdo con los documentos de la Alcaldía, el plan que contemplan para el lote donde está la antigua fábrica de bebidas es construir 9.553 viviendas estrato cuatro, 1.259 viviendas de interés social y 1.526 viviendas de interés prioritario. Pero también habrá una renovación ecológica mediante la sustitución de 10.777 árboles por árboles de especies nativas que autorice el Jardín Botánico.
El proyecto prevé la plantación de árboles de Guayacán, Nogal, Cedro, Magnolio, Sauce, Roble, Arrayán, entre otros, que según la Alcaldía tienen mayor captación de dióxido de carbono (CO2), menor riesgo de volcamiento, consumen menos agua y crean mejores hábitats para la fauna local. Adicional a la sustitución, habrá compensación de especies con la siembra de 21.550 árboles en la ciudad.
Con el plan también se busca impactar en la malla vial de la zona, al ceder parte del suelo del predio para la ampliación de la Avenida Alsacia. Este predio es clave porque allí se construirá el perfil completo de la vía y la intersección a desnivel sobre la Avenida Boyacá. Además, el plan también plantea la contrucción de cuatro puentes peatonales: uno sobre la Av. Alsacia y tres sobre la Av. Boyacá.
Otra de las razones del Distrito para defender el proyecto es la cantidad de hectáreas que pasarán a ser públicas. Actualmente, 74 hectáreas (95 % del predio) son privadas y tan solo 4, el 5 % restante, son públicas. Con el proyecto que se pretende desarrollar, la balanza quedará con 41 hectáreas públicas (52,5%) y 37 hectáreas privadas (47,5%). Así imagina la Alcaldía el proyecto:
