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Los accionistas de Amazon están le exigiendo a la compañía de Jeff Bezos que deje de vender un software de reconocimiento facial llamado Rekognition, a las fuerzas del orden. La junta directiva quiere que esto ocurra a menos que se asegure que el software "no causa o contribuye a violaciones reales o potenciales de los derechos civiles y humanos".
Rekognition, que forma parte de Amazon Web Services, tiene la capacidad de realizar análisis de imágenes y videos de rostros. La tecnología puede identificar y rastrear personas, así como sus emociones. Según los informes, Amazon ha vendido Rekognition a agencias policiales en al menos dos estados, y al Control de Inmigración y Aduanas de los EE.UU.
En mayo del año pasado, la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) informó haber obtenido documentos sobre Rekognition que plantean "preocupaciones profundas sobre libertades civiles y derechos civiles". Por ejemplo, ACLU descubrió que Rekognition identificó erróneamente a 28 miembros del Congreso, confundiendo como criminales a los congresistas de color.
Una petición con músculo
Ahora, la petición ha sido organizada por la ONG Open MIC y representa a un grupo de accionistas que representan un total de 1.32 mil millones de dólares en activos. Además, la resolución está encabezada por la orden de mujeres católicas con sede en Long Island, las Hermanas de San José de Brentwood.
"Es un patrón familiar: una empresa de tecnología líder que comercializa lo que se considera una tecnología innovadora sin entender ni evaluar los muchos daños reales y potenciales de ese producto", escribió en su blog, el director ejecutivo de Open MIC, Michael Connor. “Las ventas de Rekognition al gobierno representan un riesgo considerable para la empresa y los inversionistas. Por eso es imperativo que se suspendan las ventas de inmediato".
Los inversionistas activistas quieren que el directorio de Amazon investigue la tecnología y recomiendan consultar con expertos en libertades civiles y defensores de los derechos humanos. Además, tienen la intención de que esta resolución sea votada en la reunión anual de Amazon en unos meses. Hasta ahora Amazon no ha realizado ningún comentario sobre el tema.
A diferencia de China, que está tomando un rol más activo en la adopción de tecnologías que permitan el reconocimiento facial, los países occidentales están siendo más tímidos. Es más, algunos como el presidente de Microsoft, han hecho un llamado a regular el reconocimiento facial antes de convertirnos en 1984.