En el marco de la situación actual, el Mambo ofrece un espacio de reflexión alrededor de la naturaleza, el espacio y el territorio. La convocatoria Efectos Secundarios, vigente hasta el 16 de agosto del año en curso, promueve la realización de obras que reflexionen alrededor de la relación del hombre con la naturaleza, de la espiritualidad, y de las acciones que afectan la vida natural y comunitaria.
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Existe un esfuerzo global por tratar de rastrear el origen del COVID-19, como se ha hecho con otras enfermedades, y esto implica, necesariamente, pensar la relación entre naturaleza, paisaje, territorio y epidemias. Según se lee en la página web del Museo, “el paisaje puede ser un medio en sí mismo capaz de transmitir mensajes culturales, políticos e históricos, o puede incluso ser considerado como un medio de intercambio y práctica social que expresa conceptos de apropiación visual, identidad y poder”. Frente a esto, el Mambo abre un espacio para que artistas audiovisuales piensen sobre cómo se puede investigar el medio ambiente, cómo se puede dar un debate alrededor del paisaje urbano y la sostenibilidad, y qué papel juega el arte después de la crisis.
Personas naturales y jurídicas, al igual que colectivos artísticos que lleven trabajando entre 6 y 15 años en artes audiovisuales, pueden participar de la convocatoria. Las propuestas deben presentarse como video, realidad virtual o arte sonoro para la Sala Múltiple o la Sala Sonia y Carlos Haime del Museo.
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Con la convocatoria Efectos Secundarios, el Mambo va a premiar a dos artistas con $10 millones para cada uno. Esta cantidad incluye el costo de realización de la obra y el salario de cada uno de ellos. El primer ciclo expositivo del Museo en el 2021 va a ser el escenario de proyección de las obras.