Los nuevos lenguajes del arte escénico

"Mía sobre ella misma" parte de una reunión de amigos donde al final las apariencias pasan cuenta de cobro y la virtualidad será su mayor cómplice. Cuenta con la actuación de Marisol Correa, Carlos Alberto Pinzón y Juan David Galindo entre otros reconocidos actores.

Foto: Andrés Pedraza – Deca Teatro

La compañía Deca teatro regresa con una exploración multimedial. Su nueva obra, Mía sobre ella misma, dramaturgia de Moisés Ballesteros, es creada a modo de multi pantalla por el grupo teatral, bajo la dirección de Daniel Calderón. A través de un idioma que cada vez se hace más familiar, con formatos y lenguajes que llegan a nuevos públicos se busca transmitir esa diversidad de información a la que hoy en día se ve expuesta la sociedad. El objetivo de esta temporada es brindar una experiencia única a los observadores donde la interacción sea mayor.

Calderón se refiere a la creación como algo diferente que “requiere hacer distintos procesos, es un reto desde el presupuesto, la energía que se le imprime y los tiempos que conlleva. Es como hacer tres montajes en uno, además de hacer la obra hablando del trabajo actoral, montaje, luces, coreografía, música y todo el equipo que converge para lograr el resultado. Al combinarlos, se logra una experiencia que solo se puede explicar al momento en que el público participa y la disfruta”.

Una historia sencilla que busca involucrar nuevos formatos, donde la interacción de los observadores y usuarios es mayor gracias a la invitación que reciben una vez se sumergen en el mundo de lo que Calderon denomina teatro por WhatsApp. La experiencia transmedia busca ir más allá de las barreras impuestas por el momento de aislamiento y tiene por objetivo sacar el máximo provecho de las herramientas tecnológicas con las que cuenta el espectador. “Sean o no las personas cercanas a las redes sociales, todos usan ese tercer brazo, como lo llamo yo, para ser cómplice en este caso de una reunión de amigos que es la historia que se cuenta en Mía sobre ella misma” explica Calderón al referirse al uso del celular.

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Marisol Correa, es la actriz que interpreta a Antonia y se refiere a la obra como una experiencia donde “el público está conectado de principio a fin, se recibe tanta información que se genera una interacción que absorbe todos los sentidos. En cuanto al montaje, cada nueva solicitud era un reto actoral, en especial porque fue una experiencia diferente para mí como actriz, el aprendizaje es muy grande”.

La necesidad de interactuar es parte importante del desarrollo de esta nueva forma de creación. El formato, aunque novedoso para muchos, nace en Chile y Argentina como una experiencia más enfocada en lo sensorial y llega Colombia desde el 2017 con Deca teatro. Referente al formato, el director explica “se indaga cómo lograr una narrativa teatral a partir de tener presencia del WhatsApp y el teléfono celular en recorridos dentro de un teatro. Si bien se ha desarrollado de forma presencial, en este momento por las condiciones actuales, estamos más involucrados en el teatro online con el formato de teatro por WhatsApp. Aunque es un montaje previo, la experiencia es directa, dinámica y el público tiene una participación muy activa a lo largo de todo el espectáculo”.

Juan David Galindo es el actor que interpreta a Enrique, habla desde el ejercicio del espectador: “es una experiencia interactiva donde el público tiene la oportunidad de participar y en algunos casos de tomar decisiones de cómo quiere que se desenvuelva la historia, qué personajes quiere ver, al menos en qué orden, lo que brinda un elemento de frescura que sale del teatro convencional”. Destacó además, lo novedoso de este formato que le apuesta a lograr un montaje ciento por ciento online con interacción en vivo.

Sin duda, los nuevos lenguajes y la forma de utilizarlos para el beneficio de la creación artística se han convertido en una ola constante que por estos días ha tomado más fuerza y relevancia. Si bien el consumo de este tipo de contenidos no es apuesta segura para todos los públicos, sí es una arriesgada forma de entregar un estilo de teatro que puede tomar fuerza entre los públicos que ya por derecho pertenecen a la generación del consumo multimedial.