No fue fácil la tarea de la ministra de Transporte, Natalia Abello. Así lo reconoció el sindicato de trabajadores de dicha cartera, quienes la acompañaron en la carpa improvisada afuera del edificio, para despedir a la samaria que duró 20 meses al frente del cargo.
“Los que llevamos 21 años hoy completamos 11 ministros y cada uno ha dado de a poco con autonomía. A la que más duro le tocó fue a usted, porque tener dos jefes de esa magnitud fue duro. Frente a los proyectos hicimos la tarea de no planear por planear, siempre nos castigaban porque nunca cumplíamos fue una de las cosas buenas de Vargas Lleras, tengo que reconocerlo, aunque no lo apoyo”, le dijo María del Carmen Vivas, presidenta del sindicato de trabajadores.
Abello por su parte, tras reconocer que este es su último acto público, aseguró que el ministerio hoy está a la vanguardia tras dejar un ambicioso programa de infraestructura de transporte en ejecución. “Colombia en el 2021 será otro país, en cinco años tendremos terminado este proyecto de infraestructura. En ese año seremos recordados por el sector que transformó el país”.
No obstante, al margen de esas declaraciones, el choque más fuerte que tuvo la ministra fue el accidentado proceso de legalizar el transporte de lujo en el país, empezando por el caso de Uber. “Siempre hay temas que deben transcender más allá de los gobernantes. Avanzamos mucho en el tema de la regulación, uno de los avances de finales del año pasado fue la expedición del decreto del servicio de lujo y ya tenemos publicado en la página la reglamentación para la habilitación de las plataformas tecnológicas. Ese fue nuestro compromiso y ya lo hicimos. Es parte del avance. Ahora hay que ponerlo en ejecución y ya quien me sucederá tendrá ese reto”.
Aunque ante la insistencia de la pregunta si entonces Uber era legal o no, la funcionaria se abstuvo de responder, pero recalcó que la reglamentación al servicio de lujo ya está en la página web del Ministerio de Transporte.