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En una unión que ha dado millonarios frutos, la más grande embotelladora de Coca-Cola en el mundo, y la compañía que representa a esta afamada bebida gaseosa como corporación y casa matriz, se unieron para desembolsar US$ 575 millones y se hicieron al negocio de alimentos líquidos de soya conocido como Ades.
Los protagonistas, por un lado, son The Coca-Cola Company y Coca-Cola Femsa, por el otro Unilever, dueño de Ades, marca que fue presentada así: “Fundada en 1988 en Argentina, Ades es la marca de alimentos líquidos de soya líder en Latinoamérica. Siendo la primera marca de gran escala que se lanzó en esta categoría, Ades ha sido pionera en el desarrollo del segundo mercado más grande de alimentos líquidos a base de soya en el mundo. Tiene presencia en Brasil, México, Argentina, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Chile y Colombia. Durante el 2015 vendió 56.2 millones de cajas unidad de bebidas y generó ingresos totales de US$284 millones”.
En un comunicado oficial entregado por la compañía norteamericana propietaria de la más afamada bebida en el mundo, se advierte que “la adquisición de Ades marca otro importante hito para el sistema Coca-Cola ampliando la oferta de nutritivos y deliciosos productos para nuestros consumidores. Estamos muy entusiasmados de añadirla a nuestro portafolio de bebidas no carbonatadas. Con esta transacción, extendemos la exitosa trayectoria de los joint ventures con nuestros socios embotelladores en Latinoamérica y traemos más innovación a nuestros mercados”, detalló Brian Smith, Presidente de Grupo de Latinoamérica de The Coca-Cola Company.
Por el lado de Unilever, Miguel Kozuszok, EVP de Latinoamérica, aseguró que “esta venta es un paso adicional en el rediseño de nuestro portafolio en Latinoamérica para generar crecimiento sostenido para Unilever y nos permite afinar nuestro enfoque. Ades es una marca icónica y creemos que su potencial puede maximizarse dentro del sistema Coca-Cola”.