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Los despidos por la crisis del coronavirus en Estados Unidos continuaron la semana pasada, mostraron la cifras publicadas este jueves por el Departamento de Trabajo que revelaron que las nuevas peticiones de subsidios por desempleos sumaron 1,48 millones.
Tras la revelación de estas cifras, mayores a lo esperado, Wall Street abrió a la baja este jueves: el Dow Jones perdía 0,49% y el Nasdaq 0,10%.
El miércoles, la bolsa de Nueva York ya había cerrado con un fuerte retroceso (el Dow Jones cayó -2,71 % y el Nasdaq, -2,19 %) ante preocupaciones por el exponencial aumento de los casos de coronavirus en varios estados de la Unión y su posible impacto en la economía del país.
En la semana terminada el 20 de junio, los nuevos pedidos de subsidio registraron una baja con respecto a las cifras revisadas de la semana anterior, pero se ubicaron por encima del nivel de 1,25 millones de peticiones que esperaban los analistas.
Desde mediados de marzo, cuando comenzó el confinamiento por la pandemia, la cifra total de personas que reciben ayudas por desempleo asciende de 47,2 millones.
En tanto, en la semana terminada el 13 de junio, la cantidad de personas que cobran seguro de desempleo bajó medio punto a 13,4 %.
Estas cifras, que son un pulso en tiempo real de la marcha de la economía, mostraron que pese a que en unos cuantos estados el desconfinamiento lleva varias semanas y muchas empresas volvieron a abrir, millones de personas siguen requiriendo ayuda por desempleo.
"Otra semana en la que las nuevas peticiones bajan aunque se mantienen en un nivel elevado, lo que quizás está mostrando la incapacidad de las empresas de mantener su fuerza de trabajo en un entorno con reglas más restrictivas", constató la consultora HFE.
Según los datos del Departamento de Trabajo, las mayores niveles de desempleo se registran en Nevada, Puerto Rico, Hawái, Nueva York, California, Michigan, Louisiana, Massachusetts, las Islas Vírgenes y Connecticut.
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la economía de Estados Unidos se contraerá 8 % este año.
Para la oposición demócrata, estas cifras de empleo muestran que la crisis está lejos de terminarse. “Trump se ha rendido. Le preocupan más su futuro político que las vidas y las fuentes de ingreso de los estadounidenses”, dijo en el comunicado el Comité Nacional del Partido Demócrata.