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El ministerio de Comercio, la Superintendencia de Industria, la Policía Fiscal y Aduanera y la Dian unieron esfuerzos para buscar que los comerciantes colombianos que aún no lo han hecho, le apuesten a la legalidad. Y el primer operativo lo hicieron en San Victorino, en Bogotá, y en El Hueco, en Medellín. (Lea: Acorralados en San Victorino)
María Claudia Lacouture, ministra de Comercio, explicó que el “operativo mancomunado de las cuatro entidades busca competitividad en sector de comercio de textiles”, refiriéndose, precisamente, a las acciones conjuntas adelantadas en San Victorino dentro de la campaña conocida como Brigadas por la legalidad. (Lea: La pelea entre comerciantes colombianos y chinos)
La Superintendencia ejecutó durante la primera acción, 13 visitas de inspección a bodegas y locales de esa zona comercial, porque “tenemos que garantizar que en esta zona los productos cumplan con reglamentos técnicos”, detalló Pablo Felipe Robledo, superintendente de Industria.
La SIC verificó que se cumplieran los reglamentos técnicos de etiquetado en ropa y juguetes, pues Robledo detalló que “en cerca de tres mil prendas se encontraron incumplimientos de etiquetado”. Y se tomaron muestras de juguetes para hacer pruebas de desprendimiento de metales pesados, tales como plomo y cadmio. "Es el primer gran golpe de Brigadas por la legalidad, que continuará semanalmente”, apuntó Lacouture.
El balance, al final, fue contundente: “más de 500 mil prendas, la mayoría de origen chino, avaluadas de acuerdo a las tablas de precios de la Dian en $5.281 millones aproximadamente, fueron aprehendidas en el sector de La Capuchina, por la Polfa”, detalló el ministerio. El director de la Dian, Santiago Rojas, fue claro en que el “contrabando trae desempleo, quiebra empresas”. Y advirtió: “Seguiremos trabajo duro contra la ilegalidad”.
En el balance también se informó que “las confecciones, que representan el 90% de la mercancía aprehendida, fueron halladas en 1.600 bultos, equivalentes a 8 contenedores, y está representada en camisas, leggins, sudaderas, camisetas, blusas, medias, jeans y gorras. En el operativo se les aplicó el mismo procedimiento a juguetería, bisutería y elementos quirúrgicos. Estos bienes serían distribuidos en los principales sectores de comercio de Bogotá”.
Tras dichos hallazgos se encontró el material probatorio necesario para iniciar un proceso penal que vincularía a 40 personas por contrabando (Artículo 319), favorecimiento al contrabando, lavado de activos y concierto para delinquir. Estos comerciantes se enfrentan a penas que oscilan entre 10 y 30 años de prisión y multas que van desde 1.000 a 150.000 salarios mínimos legales mensuales vigentes. Se informó también que “de manera simultánea, en Medellín se intervinieron varias bodegas del sector denominado El Hueco, en el centro de la ciudad, hallando caletas donde se ocultaban mercancías de contrabando por valor de $240’986.509, concernientes en mayor proporción a calzado deportivo y accesorios para celular”.