:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/n0t487eFtQr8yFAHqn5vsZxKV74=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/IB5JIXWNURDYLIR7AWPIX3B55I.jpg)
Con un tajante “no se incluirá la fijación de un plazo de vida útil para el sector camionero, hasta tanto no se realice un estudio que defina su alcance”, la ministra de Transporte, Natalia Abello, se dirigió a los delegados de los transportadores que participan en los diálogos con el Gobierno, con miras a levantar el paro en las próximas horas.
Y mientras se suman jornadas de negociaciones en Bogotá, en los puntos de concentración de la inmovilización camionera se empieza a sentir la desesperación de los propietarios de los vehículos que hoy cumplen 18 días de protestas y no ven una salida a la problemática, a tal punto que se han registrado escaramuzas de bloqueos y alteración del orden público que han sido bien controladas por las autoridades.
Esta es la lectura del Gobierno de las casi tres semanas de inmovilización de algunos disidentes de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC) y de la Asociación de Transportadores de Carga (ATC), quienes iniciaron la protesta de manera pacífica para pedir la reducción de los precios de los peajes, el costo de los combustibles y el ajuste en las tablas de fletes.
Si bien los males del sector camionero no distinguen gremio y todos están de acuerdo con las peticiones, no coinciden en la forma de la protesta.
Mientras los disidentes de la ACC, liderados por el empresario Pedro Aguilar, y Orlando Ramírez, de la ATC, insisten en la protesta, otros sectores están laborando y siguen atendiendo la mesas para buscar negociadamente salidas a los problemas que sin duda afectan la industria camionera.
La ministra Abello le dijo a El Espectador que durante las 100 horas de negociaciones las conversaciones han sido amables y el Gobierno ha centrado su diálogo en tres temas fundamentales que tienen que ver con la sobreoferta de camiones, la situación estructural de los fletes y los costos eficientes del sector.
La funcionaria, que mantiene el diálogo como la vía para encontrar una salida a esta problemática, reconoció que existe una sobreoferta de vehículos, pero recalcó que eso no se resolverá de la noche a la mañana.
“Tenemos $1 billón para hacer la renovación del parque automotor y nuestro compromiso es la reposición de 40.000 camiones durante este cuatrienio”, aseguró. Asimismo indicó que se hará una inspección de los vehículos para determinar cuáles están mal matriculados y aplicar las respectivas correcciones.
Con respecto al valor del flete, la ministra explicó que se busca que los costos de operación sean eficientes, de modo que haya un equilibrio entre las empresas generadoras de carga, las compañías transportadoras y los transportadores.
“Hay denuncias serias de los camioneros que están operando por debajo del costo eficiente, pero no sólo por fletes, sino por peajes y por los precios de los combustibles. Es en lo que estamos trabajando, para evitar que cada año se presente esta situación”, añadió Abello.
Advirtió que hay una libertad vigilada y que esta medida se mantendrá, pero en el momento en que se identifiquen distorsiones en el mercado, el Estado intervendrá.
“Para ello estamos analizando dos aspectos, la carga por kilómetro transportada y el tipo de producto movilizado. He propuesto 12 meses de monitoreo y hacer una evaluación para tomar medidas”, aseguró.
Pero mientras que la titular de la cartera muestra los avances de las negociaciones, que podrían dar frutos en las próximas horas, los transportadores hicieron algunos bloqueos en el Eje Cafetero, especialmente en Risaralda y Nariño, donde prácticamente ocuparon la vía Panamericana. También hay dificultades en los departamentos de Valle del Cauca, Antioquia, Cauca y Cundinamarca, donde se presentan congestiones por las inmovilizaciones, como consecuencia del cansancio y la falta de ingresos.
El presidente de Asecarga, Jairo Herrera, señaló que los 18 días de inmovilización le han costado a la economía del país cerca de $318.530 millones.
“Es urgente y necesario llegar a una solución concertada con los camioneros independientes en paro, ya que están afectando enormemente la economía nacional en todos los frentes”, explicó.
Asimismo recomendó al Gobierno crear el Fondo para el Desarrollo de la Carga (Fondecarga), que permita financiar el sector en salud, vivienda, reposición y capacitación de conductores y propietarios de vehículos.
Al cierre de esta edición las partes habían avanzado considerablemente y no se descarta un acuerdo que permita cerrar este capítulo que ha ocasionado situaciones que afectan a las comunidades, las familias camioneras y la economía del país.