El nuevo gerente de la Federación Nacional de Cafeteros, de acuerdo con el gremio, tendrá que ejecutar de inmediato el plan estratégico para la caficultura que se formuló durante el último congreso nacional, en diciembre pasado, teniendo en cuenta las observaciones que para el agro han hecho la OCDE y la Misión Rural y las recomendaciones propuestas por la Misión Cafetera, ampliamente criticadas por representantes del gremio y Dignidad Cafetera. La tarea no es menor, pues quien llegue al cargo tendrá que asumir las riendas de una caficultura con contrastes agridulces.
Por un lado, el miércoles en la noche, mientras corría la reunión del Comité Nacional de Cafeteros, el jefe de la cartera de Hacienda, Mauricio Cárdenas, celebraba en redes sociales que las proyecciones del sector dicen que 2015 dejará unos 13 millones de sacos de café de 60 kilos, cerca de un millón más que el balance del año pasado y, de lejos, superior a la amarga cifra de 7,7 millones de sacos que dejó 2012.
Por otro lado el ministro Cárdenas daba cuenta también de que el precio promedio de la carga de café durante este año ha estado en $693.000, menor al umbral de $700.000 que hasta el año pasado aseguraba que los productores recibirían la Protección del Ingreso Cafetero (PIC), un subsidio que a partir de 2013 respondió a la crisis del sector.
El ministro de Agricultura, Aurelio Iragorri, ha insistido en que el PIC no se reactivará debido a la difícil situación fiscal del país, mientras representantes como el del comité del Quindío, Carlos Cardona, han dicho que la situación es crítica. De acuerdo con él, los cafeteros se están quedando con apenas el 40% de los beneficios de las cosechas, pues el resto se va en los altos costos, como el de la escasa mano de obra.
Por ese motivo, entre otros, el pasado 22 de junio salieron a protestar cafeteros en Tunja, Bosconia y Armenia, donde, según Dignidad Cafetera, 12.000 productores de nueve departamentos hicieron ver su descontento. Otra de las razones era salir “en defensa de la garantía de compra del grano”.
La eliminación de esa garantía es precisamente una de las recomendaciones que hace la Misión Cafetera, que el nuevo gerente tendrá que tomar como insumo. Al respecto, Iragorri respondió: “Nunca se ha hablado de acabar la garantía”.
Lo que sí se discutió durante la reunión del Comité Nacional de Cafeteros, en la noche del miércoles, fue la posible creación de un Fondo de Estabilización de Precios del Café, una petición que hacen los productores, entre ellos los que salieron a protestar. “Se acordó un grupo técnico de los ministerios de Hacienda y Agricultura, el Departamento Nacional de Planeación, Finagro y los cafeteros para hacer un estudio del tema”, dijo Iragorri, al tiempo que reconoció que es una alternativa para hacer frente a las “dificultades” que se presentan por la volatilidad del precio del grano.
También se discutió el cómo y el cuándo de la elección del nuevo dirigente gremial. Inicialmente el comité directivo de la Federación, compuesto por los 15 representantes de los departamentos cafeteros, había propuesto que la elección se hiciera en septiembre, durante un congreso extraordinario, pero en reunión del Comité Nacional, en el cual participan, además de los 15 comités departamentales, los ministerios de Hacienda, Agricultura, Comercio y Planeación Nacional, se decidió ponerle acelerador. Por eso la elección se hará el próximo 12 de agosto en un congreso extraordinario. El nuevo líder de la Federación saldrá de una terna que a su vez será elegida de entre decenas de aspirantes que enviarán sus hojas de vida hasta el 10 de julio.
El sonajero para el nuevo gerente incluye al antioqueño Luis Eduardo Gómez, expresidente de Finagro y ligado al sector cafetero por años, pues fue director del comité cafetero de Antioquia, entre otras posiciones. Asimismo suena con frecuencia el nombre de Juan Esteban Orduz, director de la oficina de la Federación de Cafeteros en Nueva York.
“Que permita que se haga la discusión a fondo de la problemática cafetera, de la federación: desde los sueldos de los funcionarios hasta las exportaciones y el precio interno del café, y que nos permita hacer los cambios en la institucionalidad de acuerdo al mercado”, dijo Iragorri al referirse al perfil que considera debe tener el dirigente que va a llegar.
En diálogo con este diario en junio pasado, Óscar Gutiérrez, coordinador de Dignidad Cafetera, dijo que la prioridad para el movimiento es que el nuevo gerente conozca el sector, así no sea caficultor, y defienda ante todo los intereses de los productores.