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La jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, urgió el jueves al Parlamento europeo a aprobar el presupuesto de la Unión Europea (UE) para el periodo 2014-2020, cuestionado por numerosos diputados que consideran que los recortes adoptados afectarán al crecimiento económico y al empleo.
Merkel sostuvo ante el Bundestag (cámara baja del Parlamento alemán) que el compromiso sobre el presupuesto alcanzado a inicios de mes por los 27 países de la UE, al cabo de 24 horas de extenuantes negociaciones, tiene "un valor inestimable".
Pero ese acuerdo tiene que superar aún el escollo de la aprobación del legislativo europeo, prevista para julio.
El trámite se anuncia difícil, dado que los líderes de los cuatro mayores grupos lo declararon inaceptable en su forma actual, alegando que no ayudará a reactivar a la economía europea, golpeada por la recesión y la crisis de la deuda.
"Sé que habrá discusiones duras en el Parlamento. Eso es natural", dijo Merkel. "Sin embargo, sería sensato concentrarnos no en lo que divide, sino en lo que acerca al Consejo Europeo (de los gobiernos nacionales) y al Parlamento", subrayó.
El acuerdo de los 27 establece un techo de compromisos de 960.000 millones de euros, un 3% menos que el presupuesto anterior, del que los países miembros tendrán que pagar 908.400 millones.
Esos recortes se suman a los decididos por los distintos presupuestos nacionales. "Digámoslo claramente: nadie (...) hubiera entendido que todos tengan que ahorrar en Europa y que Europa no lo hiciera", dijo Merkel.