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La Universidad de Antioquia, sede Medellín, y la Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá, fueron dos de los puntos de concentración elegidos ayer para citar a la jornada del paro nacional de ayer.
En la Universidad de Antioquia se concentraron miles de personas para unirse a la jornada del Paro Nacional desde muy entrada la mañana. Incluso, el día 20 de noviembre, circuló un video en redes sociales en donde se veía a estudiantes cerca de la zona de Ingeniería que impidieron que cuatro encapuchados se llevaran tres cilindros de la universidad. Aunque el rechazo a la violencia en las manifestaciones fue la regla general, sin embargo, a eso de las 4:30 de la tarde, se comenzaron a presentar disturbios dentro del campus de la universidad.
"Esta manifestación violenta es un atentado contra la esencia de la vida universitaria, en la cual no puede haber espacio para la intimidación y el miedo, y menos para la instrumentalización de la protesta con el propósito de cometer delitos. Esta agresión a los espacios universitarios resulta especialmente significativa ya que el grupo de encapuchados interrumpió servicios de salud y bienestar, y asaltó las oficinas de la Unidad Especial de Paz y la Unidad para la Resolución de Conflictos, programas que materializan nuestras apuestas por la construcción de paz en Colombia", escribió la oficina de prensa de la universidad.
Hasta ahora, el reporte de los desmanes es que no entró fuerza pública a la universidad, hay un herido y cero muertos. Los encargados del Observatorio de Derechos Humanos Fabiola Lalinde de la Personería de Medellín lograron evacuar a las personas por la salida de emergencia del ferrocarril, junto con Personería.
Por eso, el Consejo Académico decidió desde el miércoles suspender todas las actividades académicas y administrativas por hechos vandálicos en el campus educativo. Tras los disturbios de ayer, la rectoría anunció en un comunicado que tampoco habrá clases hoy viernes 22 de noviembre. "La decisión se toma en razón a que luego de la marcha pacífica un grupo de personas, muchas de ellas ajenas a la Universidad y con intereses opuestos a los de la movilizacion y la protesta, ingresó por la fuerza al campus y ocasionó graves disturbios, por lo que se hace necesario evaluar el estado de la infraestructura para garantizar condiciones de seguridad a la comunidad universitaria y a la ciudadanía en general. Las sedes y seccionales por fuera del Valle de Aburrá reanudarán sus actividades con normalidad el viernes 22 de noviembre", dijeron.
En cuanto a la Universidad Nacional, sede Bogotá, que también fue un punto de concentración para miles de marchantes que se movilizaron pacíficamente, se empezaron a presentar disturbios en la carrera 30 entre encapuchados y agentes del Escuadrón Movil Antidisturbios (ESMAD). La estación de Transmilenio de la NQS fue atacada, y los estudiantes que se refugiaron en la universidad se quedaron encerrados por más de dos horas, atrapados en el enfrentamiento.