Esos 200 millones se sumarán así: a los 528 millones de euros que el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, comprometió en 2006 con el fin de luchar contra el hambre y la pobreza.
Moratinos fue el encargado de anunciar esta nueva contribución en Naciones Unidas ante la ausencia de Zapatero, que se encontraba reunido con el consejo editorial del New York Times y retrasó su llegada a la sede de la ONU.
El jefe de la diplomacia española ratificó el “compromiso claro y decidido” de su país en favor de un mundo en paz, sin hambre ni pobreza e instó a los 192 países miembros de Naciones Unidas a asumir los Objetivos de Desarrollo del Milenio a través de una “solidaridad global”.
El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, agradeció públicamente a Moratinos la nueva contribución al Fondo España-PNUD y describió los avances logrados en su país en áreas como la salud y la educación pública gratuita gracias a esa ayuda.
“Con esa iniciativa del Gobierno español, administrada por el PNUD, estoy seguro de que el pueblo de Guatemala va a cumplir su Carta Magna” y alcanzará el bienestar no logrado en los últimos 54 años, manifestó Colom.
En la misma línea, el primer ministro marroquí, Abás El Fasi, destacó la importancia de la ayuda española en programas destinados a luchar contra la violencia de género y a proteger el patrimonio cultural en su país.