Henrique Capriles denuncia asedio de grupos armados en aeropuerto de Margarita

AFP.

El dirigente opositor venezolano Henrique Capriles denunció este miércoles estar "sitiado" por grupos armados vinculados con el chavismo en el aeropuerto de la isla de Margarita, en el norte de Venezuela, a donde llegó en horas de la noche.

"Estoy sitiado en este momento por bandas armadas del gobierno, encapuchados (...) Aquí hay gente, aquí hay niños, no soy yo solo", alertó Capriles en un video difundido en la red social Periscope.

Dos horas después de esa denuncia, en otro mensaje enviado por esa misma vía, el excandidato presidencial opositor dijo que consiguió gestionar con las autoridades aeroportuarias la salida de las personas que quedaron atrapadas en la terminal aérea por los incidentes, pero que él todavía permanece bajo asedio.

"Logramos que salieran todos los pasajeros y estamos solo nosotros", expresó Capriles, refiriéndose a diputados y alcaldes opositores que le acompañan y que se encuentran sitiados desde hace varias horas en el lugar.

La denuncia se produce días después de una protesta contra el presidente Nicolás Maduro en Villa Rosa, a las afueras de la mayor ciudad de Margarita, Porlamar. Según videos difundidos por opositores, los manifestantes rodearon al mandatario, tocando cacerolas, cuando hacía un recorrido a pie.  

Capriles responsabilizó a Maduro por los hechos de este miércoles en el aeropuerto internacional Santiago Mariño, en el estado insular de Nueva Esparta.

"Maduro quiere un muerto acá en aeropuerto de Margarita y no lo vamos a permitir. A eso vinieron sus bandas armadas", escribió en Twitter.

El dirigente viajó a Margarita por la fiesta patronal de la Virgen del Valle, cuyo día se celebra mañana jueves con una procesión y diversas actividades religiosas.

"Yo tengo 13 años viniendo en el día de la virgen y Maduro no lo va a impedir", indicó Capriles. 

Entre el viernes y el sábado de la semana pasada, unas 30 personas fueron detenidas tras la protesta contra Maduro en Villa Rosa. Todas fueron liberadas, salvo el periodista chileno-venezolano Braulio Jatar.