La OTAN responsabilizó este viernes a Rusia del fracaso del tratado de eliminación de misiles de corto y medio alcance (INF) suscrito por la URSS y EEUU en 1987 y respaldó a Washington en su decisión de retirarse del mismo.
"Rusia es la única responsable del fin del tratado", señaló la Alianza en una declaración, que añade que Moscú ha seguido "violando" las disposiciones del mismo pese a las advertencias de los aliados y que como resultado, ahora toma efecto la decisión de EEUU, de retirarse, "plenamente apoyada por los aliados de la OTAN". Sin embargo, dice el comunicado, "la OTAN no quiere una carrera armamentística".
"Rusia es plenamente responsable del fin del tratado. Lamentamos que no haya mostrado ninguna voluntad de volver a cumplir con sus obligaciones internacionales", dijo la alianza en un comunicado.
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Rusia confirmó este viernes su salida oficial del tratado INF, "por iniciativa de Estados Unidos", mediante un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores ruso.
Poco después hizo lo mismo el gobierno estadounidense, por boca de su secretario de Estado, Mike Pompeo, de visita en Tailandia.
En su comunicado, la OTAN adelantó la adopción "de un paquete de medidas equilibrado, coordinado y defensivo" para "garantizar que la postura de disuasión y defensa de la OTAN siga siendo creíble y eficaz".
Las dos partes del acuerdo INF, firmado en 1987 entre EEUU y la entonces Unión Soviética para frenar el despliegue de misiles terrestres de alcance intermedio, se acusan mutuamente de incumplirlo.
"La OTAN sigue aspirando a una relación constructiva con Rusia cuando sus acciones lo permitan", agrega la Alianza.