Terror en el corazón británico

Europa vuelve a ser golpeada por el terrorismo. Justo un año después de los ataques yihadistas en Bélgica, Londres se sume en el caos y el horror con un ataque en Westminster, la zona donde se congregan el poder político y el turismo.

redacción internacional
23 de marzo de 2017 - 05:18 a. m.
Ambulancias y cuerpos de seguridad llegaron a Westminster para atender a los heridos.  / AFP
Ambulancias y cuerpos de seguridad llegaron a Westminster para atender a los heridos. / AFP
Foto: AFP - NIKLAS HALLE'N

“Este es el día que planeamos muchas veces, pero esperábamos que nunca sucediera. Tristemente, ahora es una realidad”. Con estas palabras, el jefe de la unidad antiterrorista de la Policía londinense, Mark Rowley, confirmó que el ataque en el Parlamento británico —uno de los lugares más custodiados del mundo— fue un “atentado terrorista”.

Hace apenas unos días, los servicios de seguridad británicos anunciaban un gran logro: desde junio de 2013 habían logrado abortar trece intentos de atentados terroristas. Un récord entre las policías europeas.

A pesar de tal nivel de eficacia, decidieron no rebajar el nivel de alerta terrorista: desde hace mucho se mantiene en “severo” (el segundo más alto), que significa que era “altamente probable” que se presentaran atentados.

Ayer, un hombre a bordo de un vehículo y armado con dos cuchillos sembró el caos en el corazón del poder británico: el área de Westminster, donde están ubicados el Big Ben, la sede del Parlamento y la mayoría de ministerios y dependencias gubernamentales.

Según la policía británica, este ataque, que deja hasta ahora cinco muertos y 40 heridos (cinco de ellos en estado crítico) es el más grave de los últimos doce años. Londres tenía en su memoria el del 7 de julio de 2005 contra el sistema de transporte, reivindicado por Al Qaeda, que dejó 56 muertos y 700 heridos.

El supuesto terrorista atropelló a varios peatones que cruzaban el puente de Westminster, matando a dos e hiriendo a 20. Luego se dirigió al recinto del Parlamento, estrelló su vehículo contra una reja y se bajó para atacar a un policía con arma blanca. Fue abatido a tiros por las autoridades que custodian el lugar.

El policía no logró sobrevivir, a pesar de la heroica intervención del diputado conservador y antiguo militar Toby Ellwood, que perdió a su hermano en un atentado en Bali (Indonesia), en 2002. “Traté de cortar el flujo de sangre y le hice el boca a boca (...), pero creo que había perdido mucha sangre”, explicó Ellwood en declaraciones al diario The Sun. “Tenía varias heridas, bajo el brazo y en la espalda”, añadió.

El ataque recuerda lo ocurrido en un mercado navideño en Berlín, en diciembre de 2016, cuando un hombre arrolló con su camión a varios transeúntes. Y el de Niza, el año pasado también, donde un atacante mató con su vehículo a 84 personas.

Se produjo justo el día en que Bruselas conmemoraba el primer aniversario de los ataques que dejaron 32 muertos en el aeropuerto y el metro.

El día del miedo

Las escenas de terror se repitieron durante la tarde en las calles de Westminster. Los diputados se encerraron en sus oficinas y el sonido de las sirenas y los helicópteros se apoderó del centro de Londres.

Una mujer fue rescatada con heridas graves del río Támesis, informó la Autoridad Portuaria.

La diputada Mary Creagh se dirigía a votar cuando se encontró con guardias de seguridad armados y una multitud que los seguía. “Me encontré a 40 personas corriendo hacia mí y gritando: ‘Devuélvase, hay un tiroteo’”, narró a la prensa.

El comandante de Scotland Yard, B.J. Harrington, confirmó que la policía de Londres se encontraba en máxima alerta en varios puntos de la ciudad tras el “incidente terrorista”.

Las autoridades buscan a otra persona que podría ser cómplice del atacante abatido, según informó el periodista Christopher Hope, de Daily Telegraph, a través de Twitter, citando fuentes oficiales. La cadena británica BBC confirmó esta teoría, ya que varias fuentes hablaron de dos asaltantes dentro del vehículo involucrado en los hechos.

La primera ministra, Theresa May, presidió una reunión de su gabinete de crisis en su residencia de Downing Street, muy cerca del lugar del ataque, según informó la Agencia France-Presse. La jefa de gobierno convocó al comité de emergencias Cobra, que incluye a sus principales ministros y altos cargos de defensa y seguridad, para evaluar la situación.

El 2016 fue un año negro para Europa, ya que sus grandes capitales fueron golpeadas por ataques yihadistas.

Por redacción internacional

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar