Mientras los tiroteos masivos continúan conmocionando al mundo, un nuevo paquete de leyes que flexibiliza el porte de armas entró en vigor en Texas (Estados Unidos). La nueva normativa, que ofrece derechos y protecciones a los propietarios de armas en este estado sureño, fue conocida horas después de que un hombre asesinó a siete personas y dejó 22 heridas en Odessa y se produce en el mismo mes en el que un tirador irrumpió en un Walmart en el El Paso y asesinó a 22 ciudadanos, entre ellos varios latinos.
Las nuevas leyes flexibilizan el porte y uso de armas en escuelas y lugares de culto, asó como en centros de acogida y edificios. Los defensores de esta polémica reforma, como el gobernador de Texas, Greg Abbott, aseguran que esto les permitirá a las personas defenderse de las amenazas. “Algunas de estas leyes fueron promulgadas para hacer que nuestras comunidades sean más seguras”, aseguró Abbot. Por otro lado, los críticos señalan que esta medida expandirá el acceso a armas, aumentando el riesgo de nuevos tiroteos. Brady, organización que aboga por el control de armas, culpó a la Asociación Nacional del Rifle (NRA por sus siglas en inglés) de contribuir a la aprobación de la nueva normativa. Vea también: Los estadounidenses y las armas: una relación complicada
La NRA celebró desde luego la aprobación de las nuevas normas que, según dice la organización, “protegen sus derechos de la Segunda Enmienda”. La nueva normativa permitirá a los propietarios de armas, que cuentan con licencia para su porte, almacenar armas en un automóvil y poder acceder al estacionamiento de escuelas, espacios donde frecuentemente se han registrado tiroteos en todo el país. De igual manera, la ley cobija el porte de armas en lugares de culto como iglesias o sinagogas, donde también se han registrado ataques. Por último, se permite a los residentes el porte de armas en zonas de desastre estatal o local. Le puede interesar: Lo que Brasil no aprendió de la tragedia por armas en Estados Unidos
“Muchos estados aprovecharon la oportunidad en los últimos dos años para aprender lecciones de las tragedias en Las Vegas, Sutherland Springs, Parkland y la violencia armada cotidiana que afecta a nuestros ciudadanos, y promulgaron nuevas leyes para proteger la seguridad pública a través de verificaciones de antecedentes ampliadas y extremas. leyes de riesgo. Los legisladores de Texas, en cambio ... duplicaron una agenda dirigida por la NRA para alentar las armas en todas partes, sin importar los riesgos y costos para la seguridad”, le dijo Kris Brown, presidente del grupo Brady, a la cadena CNN.
El tiroteo de Odessa fue el segundo de gran envergadura dentro de Texas en un mes, hogar de cuatro de los 10 tiroteos masivos más mortales de la historia moderna de Estados Unidos. El gobernador Abbott prometió que su administración tomará medidas para prevenir tiroteos masivos, pero no se ha comprometido a hacer compromisos mayores con este problema.