Argentina no olvida la muerte de Alberto Nisman

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 Un grupo de fiscales argentinos convocó para este jueves una nueva marcha para pedir justicia en el caso de su colega Alberto Nisman, hallado muerto en enero de 2015, días después de denunciar a la entonces presidenta del país, Cristina Fernández, por presunto encubrimiento de terroristas. (Vea: Alberto Nisman, el hombre cuya muerte causó terremoto político en Argentina)

La manifestación, que arrancará a las 6 p.m., hora local, frente al Palacio de Justicia, en Buenos Aires, se llevará a cabo al cumplirse un año de la primera marcha por el mismo motivo, en la que participaron cerca de 400.000 personas.

Nisman, que estaba a cargo de la investigación del atentado contra la sede de la mutualista judía AMIA, que dejó 85 muertos en 1994, fue hallado muerto en su domicilio el 18 de enero de 2015, horas antes de comparecer en el Congreso para explicar la denuncia contra Cristina Fernández, por supuesto encubrimiento de terroristas iraníes.

Nisman basaba su denuncia en el acuerdo de entendimiento suscrito entre Argentina e Irán en 2013 y que, según el fiscal, incluía encubrir a los sospechosos del ataque a la AMIA a cambio de impulsar el intercambio comercial de granos argentinos por petróleo iraní.

Sin embargo, la denuncia fue archivada en mayo del año pasado.

Más de un año después, la investigación sigue estancada y sin un dictamen oficial sobre las circunstancias de la muerte del fiscal.

En un comunicado, un grupo de 10 fiscales y el secretario general de la Unión de Empleados de la Justicia de la Nación, Julio Piumato, convocaron a la nueva marcha de "memoria y justicia" y recordaron que hace 13 meses Argentina se "conmovía" con la muerte de quien investigaba el atentado terrorista "más brutal" que haya sufrido el país.

Además, remarcaron que Nisman acababa de denunciar a la presidenta y a otros "cómplices" del oficialismo de entonces por "encubrimiento del atentado mediante la firma del bochornoso e inconstitucional memorándum de entendimiento con Irán".

"Justamente, en vísperas de su presencia en el Congreso, invitado por los legisladores de la oposición y sometido a una campaña de agresiones, encontró la muerte", explicaron los convocantes de la marcha.

"A un año de la marcha del 18-F la sensación de que fue un abominable crimen de Estado no es motivo de duda para nadie, manteniendo la conmoción en todos", aseveraron.

Hasta el momento, por el caso de la muerte de Nisman está imputado Diego Lagomarsino, un técnico informático que trabajaba con el fiscal y dueño del arma que acabó con su vida.

También los policías a cargo de su custodia, a quienes se les imputa el delito de "incumplimiento de los deberes de funcionario público" por no haber actuado con más rapidez ante la falta de respuesta de Nisman a sus llamadas el día de su deceso y por abandonar el edificio en que vivía el fiscal para ir a buscar a su madre.

"Invitamos a todos aquellos que no quieren olvidar, que quieren que se llegue a la verdad y que reclaman que se haga Justicia con Nisman, honrando su memoria" en el acto de este jueves, agregaron los organizadores de la marcha.