El Consejo de Seguridad de la ONU y el secretario general de la organización, Ban Ki-moon, condenaron "con firmeza" el doble atentado que dejó este viernes al menos 42 muertos en Trípoli, en Líbano, y pidieron contención ante la división del país por la guerra siria.
En una declaración unánime, los 15 países miembro del consejo instaron a "todos los libaneses a preservar la unidad nacional ante el intento de perjudicar la estabilidad del país". El Consejo de Seguridad también destacó la importancia de que "todas las partes libanesas respeten el principio de disociación de Líbano y se abstengan de implicarse en la crisis siria".
Ban también pidió a la población libanesa "contención, unidad y ayuda a las instituciones del Estado, en particular a las fuerzas de seguridad, para mantener el orden y la calma en Trípoli y en todo el país", de acuerdo con un comunicado.
El Secretario general manifestó su "esperanza por que los responsables de actos tan cobardes sean llevados ante la justicia" y reiteró "la determinación de la comunidad internacional a apoyar la seguridad y estabilidad de Líbano".
Las dos explosiones se produjeron con algunos minutos de intervalo frente a dos mezquitas sunitas de la ciudad provocando al menos 42 muertos y 500 heridos.Se trata del ataque más sangriento desde el fin de la guerra civil de 1990 en Líbano.La semana pasada, en un atentado con coche bomba murieron 27 personas en Rueis, a las afueras de Beirut, bastión del poderoso movimiento chiita libanés Hezbolá.