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La Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) comenzó este domingo con el homenaje que el anfitrión y presidente de Chile, Sebastián Piñera, rindió a su colega venezolano Hugo Chávez, convaleciente tras su última operación de cáncer en Cuba.
"Un homenaje a un presidente que ha tenido un impacto profundo en la organización" de la Celac, dijo Piñera sobre Chávez, el precursor de este grupo regional que acoge a todas las naciones de América Latina y el Caribe, 33 en total, y en el que sólo están excluidos dos países del continente: Estados Unidos y Canadá.
"Todos hacemos votos para que pueda ganar esta batalla, quizás la batalla más dura de su vida", manifestó el presidente chileno sobre el cáncer que padece Chávez y del que se recupera en Cuba, donde fue intervenido por última vez en diciembre pasado.
Esta es la primera vez que se reúnen los mandatarios de la Celac tras el nacimiento de la organización en diciembre de 2011 en Caracas, cuando Chávez congregó a todos los líderes con el objetivo de que América Latina y el Caribe hable con una sola voz.
Integración en América Latina
Es el momento de "pasar de las palabras a las acciones" para lograr la verdadera integración de América Latina, dijo Piñera, en su discurso inaugural.Con la única excepción de Paraguay, los presidentes y jefes de delegaciones de los 33 países que integran este mecanismo de integración regional se reúnen a partir de este domingo y hasta el próximo lunes en Santiago.
En un discurso cargado de referencias a las raíces históricas latinoamericanas, Piñera hizo un llamado directo a sus homólogos para mirar menos al pasado y ocuparse más de un futuro donde el continente pueda actuar unido ante el mundo.
"Necesitamos más integración para enfrentar con solidez los desafíos del futuro. No podemos quedarnos atrapados en el pasado, al contrario, debemos ver hacia un futuro donde seamos protagonistas y no espectadores ni observadores del mundo globalizado", dijo.
Haciendo ilusión a una de las mayores obras arquitectónicas precolombinas, el presidente chileno propuso a los miembros de la Celac que "el nuevo Machu Picchu sea unir a nuestro continente como nunca antes".
Según Piñera, la integración es la única vía para llevar a Latinoamérica al desarrollo, pero eso dependerá de que los actuales líderes de la región no dejen pasar las oportunidades, como ha ocurrido antes.
"Hace 200 años estos países zarpamos para navegar con bandera propia en busca de nuestro futuro; éramos el continente de la esperanza pero no fuimos capaces de aprovechar esas oportunidades. Me atrevo a decir que las potencialidades de Latinoamérica están aún intactas", afirmó.
La Cumbre de la Celac comenzó en Santiago de Chile con ausencias clave, como las de los presidentes de Venezuela, Hugo Chávez; Brasil, Dilma Rousseff; Ecuador, Rafael Correa; Paraguay, Federico Franco, y El Salvador, Mauricio Funes.