Cincuenta y cinco pasajeros de un barco que se hundió con 150 migrantes a bordo en el estrecho de Sunda, en Indonesia, fueron rescatados vivos el jueves, según conteo provisional de la Autoridad de Seguridad Marítima Australiana (AMSA).
El balance anterior de rescatados era de 45, luego de que los equipos de rescate encontraran con vida a 23 pasajeros del barco que se hundió con 150 migrantes a bordo.
Un barco de la marina militar australiana, el "HMAS Maitland", salvó finalmente a 49 personas mientras que otras seis fueron rescatadas en la noche por el barco de carga "Bahráin".
Los supervivientes, que se encontraban bien físicamente, explicaron que su barco, en el que viajaban 150 personas, entre ellas algunas mujeres y niños, tuvo una avería en el motor.
El agua comenzó a entrar en la embarcación y terminó por hundirse, ya que las bombas estaban estropeadas.
Tres náufragos también están gravemente heridos, pero estables. Uno de ellos fue mordido por un tiburón, según el jefe de la misión indonesia de rescate, con sede en el puerto de Merak, en la isla de Java.
Según el ministro australiano del Interior, Jason Clare, tres buques mercantes se encontraban en el lugar este jueves para participar en la búsqueda y dos barcos de asistencia indonesios estaban en camino.
"Las operaciones de búsqueda y rescate continuarán hasta mañana con la prioridad de rescatar a los supervivientes", subrayó la AMSA.
Australia no es un destino prioritario para las personas que buscan asilo y, tan solo, representa el 2,5% de los casos ocurridos en el mundo en 2011.
Pero los migrantes que se enfrentan a este viaje saliendo desde Indonesia asumen grandes riesgos al subirse a barcos que carecen de los medios necesarios para la navegación en mar abierto, en las agitadas aguas del Pacífico.