La Sala Plena de la Corte Constitucional le dio un plazo de dos años al Congreso de la República para que legisle sobre la inclusión de una etiqueta en los productos que informe si los mismos tienen o no organismos transgénicos o han sido modificados.
Para el alto tribunal, con el fin de proteger la salud de los consumidores, el Congreso debe exigirle a los fabricantes y distribuidores de alimentos entregar toda la información para que el consumidor sepa si el producto es transgénico.
Este pronunciamiento se hizo al considerar que en el Estatuto del Consumidor no existe una norma que garantice que el consumidor tenga acceso a una información clara, precisa y visible cuando se haga referencia a los alimentos transgénicos.
En el extenso fallo se manifiestas que se los consumidores deben tener una información efectiva y clara frente al hecho que el producto que está consumiendo ha sido o no modificado. Cualquier omisión estaría vulnerando sus derechos fundamentales.
Si cumplido este tiempo persiste la falta de información sobre transgénicos en los alimentos, entrará en vigencia la inconstitucionalidad de la norma del Estatuto del Consumidor, que regula los requisitos mínimos de información sobre productos alimenticios disponibles en el mercado.