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La Sala Penal de la Corte Suprema no aceptó la inclusión de nuevos elementos materiales probatorios en el marco del estudio de la solicitud de extradición contra siete personas por su presunta participación en el robo y posterior asesinato del agente de la DEA, James Terry Watson registrado el 20 de junio de 2013 en el norte de la capital de la República.
El alto tribunal no aceptó los argumentos presentados por la defensa de dos de los implicados en este caso, que pedían evaluar la responsabilidad de sus defendidos en estos hechos ya que consideraban que es la Corte Suprema la que debe realizar este análisis y no la Corte de Estados Unidos.
En este proceso la Fiscalía y la Procuraduría General le han solicitado a la Corte Suprema que avale la solicitud de extradición al considerar que se deben cumplir con los tratados internacionales de cooperación jurídica firmados por Colombia. Así como el hecho de la protección internacional que tenía el agente.
Los procesados se encuentran privados de su libertad en la cárcel la Picota de Bogotá. Según la Fiscalía General, estas personas habrían sido los responsables de un intento de “paseo millonario” al agente de la DEA.
En las pruebas presentadas se manifiesta que el agente tomó un taxi en el parque de la 93 luego de ver la final de la NBA. Poco tiempo después, dos hombres armados ingresaron al vehículo y lo amenazaron, al ver su actitud le aplicaron electrochoques.
Poco tiempo después llegó a la “escena” otro taxi. En ese momento el agente del organismo internacional intentó escapar sin embargo recibió dos heridas morales sobre su humanidad que segaron su vida.
Igualmente son procesados por presuntamente internar eliminar los rastros de sangre de los vehículos y cualquier prueba que los vinculara con estos hechos.