:format(jpeg)/www.elespectador.comhttp://thumbor-prod-us-east-1.photo.aws.arc.pub/WmwqsPv02j5ZSxjirmi7kNIU5mE=/arc-anglerfish-arc2-prod-elespectador/public/WW3CFMTTSRD53G63FQ6NWSH5FU.jpg)
Para el próximo jueves 16 de marzo quedó programado el inicio formal del juicio en la Sala de Casación Penal en contra del suspendido magistrado de la Corte Constitucional, Jorge Ignacio Pretelt Chaljub por su presunta participación en el denominado escándalo de Fidupetrol. Ese día se presentará la acusación en contra del togado por el delito de concusión.
La fecha se fijó después de revisar las competencias, nulidad y recusaciones presentadas en este complejo caso. Fuentes cercanas señalaron que debido a la novedad y complejidad del caso que exige una integración entre un juicio político y un juicio jurídico se tuvo que adelantar un detallado estudio de la jurisprudencia existente con el fin de garantizar el debido proceso.
Ha trascendido que el procurador General, Fernando Carrillo Flórez, relevó del caso a la procuradora Liliana Cardona, quien en una polémica decisión le pidió a la Corte Suprema de Justicia anular todo lo actuado en el expediente y devolver el caso a la Comisión de Acusaciones de la Cámara de Representantes para que se corrigieran los yerros que se presentaron.
El Senado de la República acusó al expresidente de la Corte Constitucional por el delito de concusión, por presuntamente solicitarle al abogado Victor Pacheco 500 millones de pesos para seleccionar una tutela presentada por la empresa Fidupetrol para tumbar una multa de 24 mil millones de pesos impuesta por la Corte Suprema.
Pacheco citó que fue contratado directamente por el máximo accionista de Fidupetrol, Hélber Otero, puesto que conocía que él tenía buenas relaciones con los magistrados de la Corte Constitucional, por lo cual podía mover sus influencias y lograr que la tutela fuera seleccionada y avalada.
El jurista -quien ya fue condenado a dos años de prisión tras firmar un preacuerdo con la Fiscalía General- reconoció que se reunió dos veces en el despacho del magistrado Pretelt Chaljub y una en su apartamento ubicado en el norte de Bogotá.
En ese último encuentro, Pretelt le manifestó la necesidad que le entregará esa suma de dinero con el fin que la sala de selección de tutelas de la que hacía parte pasara la propuesta para que el caso fuera estudiado por la sala plena del altero tribunal debido a su importancia.
La defensa del suspendido magistrado ha manifestado en repetidas oportunidades que, en el desarrollo de la investigación en la Comisión de Acusaciones de la Cámara, le vulneraron todos los derechos procesales al magistrado.
Argumenta que no se le permitió exponer sus argumentos y que en ningún momento se le permitió presentar pruebas documentales y testimoniales para argumentar su inocencia. Debido a esto presentó una acción de nulidad en contra de la resolución de acusación.