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Después de más de seis años de búsqueda por parte de las autoridades colombianas, Juan Carlos Sánchez Latorre, alias el Lobo Feroz, por fin regresará al páis. Así lo determinó el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, al considerar procedente la solicitud de extradición hacia Colombia de este hombre, señalado de haber abusado de por lo menos 276 menores de edad. Sánchez Latorre se encuentra recluido en el centro penitenciario Rodeo II, ubicado en la ciudad de Caracas.
El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, con ponencia de la magistrada Francia Coello González, señaló que el Lobo Feroz deberá continuar su proceso judicial en Colombia y que se tendrá que descontar de su condena el tiempo que estuvo recluido en el vecino país, informó el diario venezolano El Nacional. De igual forma, reiteró que se avaló su extradición al tener en cuenta el material probatorio que enviaron las autoridades colombianas, en el que se presenta Sánchez Latorre como “presunto autor de los delitos de pornografía con menor de 18 años, acceso carnal abusivo con menor de 14 años y actos sexuales con menor de 14 años”.
Las autoridades pudieron establecer que este hombre de 37 años, nacido en Barranquilla, trabajó en una empresa de cómputo durante años como ingeniero de sistemas, pero el 14 de marzo de 2008 fue arrestado, pues era investigado por el delito de acceso carnal violento con un menor de 14 años. Sin embargo, las autoridades ya lo venían siguiendo desde 2005 pues, al parecer, ya se habían reportado en su contra más de 50 violaciones en Barranquilla.
El Lobo Feróz quedó en libertad por vencimiento de términos en 2008. Así las cosas, fue hasta julio de 2011 cuando las autoridades volvieron a tener rastro del Lobo Feroz. Los hechos ocurrieron en una redada contra pederastas. Según informó en febrero de este año la revista Semana, las autoridades mexicanas rastrearon a Héctor Faria, también conocido como Anthony. El hombre fue arrestado en un café internet, pues se encontró material de pornografía infantil en sus cuentas de correo.
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Las autoridades pudieron hallar chats, videos y fotografías provenientes de Colombia. Después de comunicarse con la Interpol en Colombia, las autoridades rastrearon una carpeta que contenía 276 archivos que tenían adjuntos fotografías de niños desnudos y un video de entre 2 a 5 minutos de duración en el que se podía ver claramente cómo un hombre abusaba de los menores. Desde Colombia se pudo identificar que estos archivos pertenecían a Juan Carlos Sánchez Latorre, el Lobo Feroz.
Al parecer, existía un negocio entre Sánchez Latorre y el mexicano Héctor Faria, quien pagaba al Lobo Feroz por cada video entre 100 y 400 dólares. Fue entonces cuando los investigadores de la Dijín empezaron a rastrear las direcciones de los cafés internet en Barranquilla. Después de seis años de pesquisas, encontraron que Sánchez Latorre se encontraba en Maracaibo (Venezuela), a donde había escapado en 2017.
Las autoridades le encontraron a Sánchez 1.450 archivos enviados a al mexicano entre 2008 y 2011. Sin embargo, en los últimos seis años, desde la investigación hasta la captura, se presume que las cifras de este hombre pueden superar los 500 casos, sin tener en cuenta lo que haya podido hacer durante el tiempo que estuvo en Venezuela. El pasado 7 de mayo, la Sala Penal del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela citó a Juan Carlos Sánchez Latorre por su presunta responsabilidad en casos de abuso sexual a menores y tráfico de pornografía infantil.
Casi un mes después, el Tribunal decidió que Sánchez Latorre deberá finalmente volver a Colombia.
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