Dos horas antes de la implosión del edificio Mónaco, el presidente de la República, Iván Duque, en compañía del alcalde Federico Gutiérrez, habló en Medellín. Lo hizo para reconocer la estrategia ‘Medellín abraza su historia’, que ha sido impulsada por las autoridades locales. Al respecto, Duque resaltó que “este evento significa la derrota de la cultura de la ilegalidad y el triunfo de la cultura de la legalidad”.
También dijo, en el Club Campestre al sur de Medellín, que “significa que la historia no se escribirá en función de los victimarios, sino que la historia se escribe reconociendo a las víctimas y significa, también, la resiliencia, la fuerza y la grandeza del pueblo colombiano y del pueblo antioqueño que tuvo que soportar por años esta violencia y que se ha parado siempre firme y ha sido capaz de superarla con convivencia”.
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Duque también aprovechó para recordar a algunas de las víctimas más reconocidas del narcotráfico, como el comandante de la Policía de Antioquia, Valdemar Franklin Quintero; el director de El Espectador, Guillermo Cano; el candidato a la presidencia Luis Carlos Galán, y el ministro de Justicia, Rodrigo Lara Bonilla. Los recordó al considerar que “hoy es el resurgimiento de una historia construida con las memorias de las víctimas (…) su sacrificio por Colombia no fue en vano, porque triunfó la legalidad”.
A su turno, el alcalde Federico Gutiérrez recordó el significado simbólico que se le ha querido dar a la implosión del Mónaco, que durará apenas tres segundos. “Aquí el mensaje es para las víctimas, para sus familias, para rodearlos, para entender que los referentes que deben conocer las nuevas generaciones son quienes representaban los valores”.
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El presidente Duque, después de su intervención, partió rumbo a Cúcuta (Norte de Santander), donde hoy se realizará un megaconcierto, que contará con la participación de 35 artistas y que se espera que tenga un aforo de más de 300 mil personas, que fue organizado por el fundador de Virgin, Richard Branson.