Imputarán a tres policías por muerte de cuatro personas en las protestas del “9S” en Bogotá

Las protestas se tornaron tan violentas que incluso el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, ordenó que 300 soldados del Ejército acompañaran las labores de la Policía

Foto: Jose Vargas

A punto de cumplirse cuatro meses de la muerte violenta de Javier Ordóñez, a manos -aparentemente- de los entonces patrulleros Harby Rodríguez y Juan Camilo Lloreda, el pasado 9 de septiembre en el CAI Villaluz de Bogotá, la Fiscalía dio inicio a las investigaciones formales por las muertes sucedidas en las posteriores y multitudinarias protestas en Bogotá y Soacha: tres policías ya fueron citadospor el ente investigador a audiencia de imputación de cargos.

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De acuerdo con la Fiscalía, estos tres uniformados deberán responder por el delito de homicidio, pues estarían involucrados en la muerte de cuatro ciudadanos que participaron en la noche del “9S” y en las posteriores jornadas. Las víctimas serían, en principio, un adolescente de 17 años y un joven de 23 años, quienes recibieron varios disparos en inmediaciones del CAI Verbenal, al norte de Bogotá.

Así mismo, los policías enfrentarán una investigación penal por la muerte de una mujer de 27 años y un hombre de 29 años, quienes fallecieron tras ser heridos con arma de fuego en los barrios Aures y Rincón, respectivamente, en la localidad de Suba. De acuerdo con estadísticas oficiales, en las manifestaciones murieron 12 personas y resultaron heridas 403, incluidos los policías que atendieron los disturbios.

Así las cosas, los tres policías deberán presentarse el próximo 18 de enero a audiencia de imputación, en la cual la Fiscalía les imputará el delito de homicidio. Por otro lado, los expatrulleros Harby Rodríguez y Juan Camilo Lloreda, quienes redujeron con violencia a Ordóñez hasta la muerte, fueron inhabilitados y destituidos por 20 años para ejercer cargos públicos, de acuerdo con la Procuraduría, y esperan citación de la Fiscalía para iniciar el proceso en la justicia penal.

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De acuerdo con cifras oficiales, en la noche del “9S” y los días posteriores a la muerte de Javier Ordóñez, más de 12.000 personas participaron en un total de 112 disturbios. Fueron vandalizados 38 Centros de Atención Inmediata (CAI) y otros 37 fueron incinerados. Alrededor de 300 policías resultaron lesionados. Así mismo, las autoridades capturaron a 134 personas e impusieron más de 600 comparendos.

“Nadie dio orden de usar armas de fuego, mucho menos de manera indiscriminada. Pero tenemos evidencias de varios lugares donde así ocurrió”, dijo la alcaldesa Claudia López, en su momento, a través de su cuenta de Twitter. Así mismo, a mediados de septiembre pasado, la Corte Suprema de Justicia emitió una sentencia para frenar los casos de abuso policial en manifestaciones, pues, de acuerdo con el documento, el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), hace una intervención sistemática, violenta y arbitraria. Se ordenó constantes capacitaciones y la prohibición de escopetas calibre 12.