El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) confirmó este viernes que los cinco internos de la cárcel La Picota contagiados con COVID-19 a principios de abril ya están completamente recuperados. Los resultados de la segunda prueba diagnóstica luego de pasados los 14 días de aislamientos dieron negativas, por lo que el cuerpo de custodia comunicó que en la prisión más grande de Colombia ya no hay contagiados por el nuevo coronavirus.
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El COVID-19 llegó el 1 de abril a La Picota de la mano de tres internos de la Cárcel de Villavicencio, que fueron trasladados por los intentos de motín a finales de marzo. Lo mismo sucedió en distintos centros de reclusión del país, pues el virus se esparció en un bus con el logo del Inpec que transportó a los ocho reclusos que fueron trasladados desde la capital del Meta.
Así lo reveló El Espectador al conocer la resolución 648 del 30 de marzo de 2020, “por medio de la cual se traslada a un personal de internos” y que aparece firmada por la directora de la regional central del Inpec, Imelda López, y el director de la prisión de la capital del Meta, Miguel Ángel Rodríguez. Eso sucedió nueve días antes de que se confirmara el primer caso por COVID-19 en la Cárcel de Villavicencio.
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El 18 de abril se confirmó que los dos internos procedentes de Villavicencio estaban contagiados. A su vez, ellos le pasaron el virus a otros dos reclusos. Tras ser aislados y seguir los protocolos de seguridad, el Inpec confirmó que casi un mes después este penal estaba libre de COVID-19.