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La Policía Antinarcóticos puso al descubierto una nueva modalidad de organizaciones narcotraficantes para evadir el control de las autoridades en el puerto de Buenaventura.
Este jueves fue interceptado un cargamento de cocaína, que camuflado en pulpa de fruta congelada, pretendía llegar a la ciudad de Amberes (Bélgica).
La ausencia de un documento indispensable para despachar el envío y las sospechas que generó el producto entre los policías, obligaron a realizar una inspección más detallada en la que se halló la droga.
“Inicialmente, el perro especializado en detección de alcaloides recorrió 114 canecas que contenían fresa congelada, y en varias oportunidades se sentó, indicando que algo ilegal se escondía. Para despejar las dudas, los uniformados extrajeron la fruta de los gigantescos recipientes en los que era transportada y con ayuda de brocas, rompieron los bloques de hielo”, explicó el coronel Arlex de Jesús Escobar Bedoya, comandante región 4 Policía Antinarcóticos.
En 12 canecas, los uniformados encontraron 495 paquetes rectangulares envueltos en cinta café y contramarcados con el logo de una compañía automotriz inglesa. Las pruebas químicas prácticas, constataron que se trataban de clorhidrato de cocaína, exactamente de media tonelada embalada y clasificada mediante algunos seriales, que son analizados.
“Los narcotraficantes en su intento desesperado por lucrase, mezclaron la droga con la pula de fruta y la congelaron para intentar evadir los controles en el puerto. Sin embargo, la pericia y el trabajo coordinado con otras entidades, facilitó la ubicación del alijo, que podría superar los 30 millones de dólares en Europa”, agregó.
En menos de un mes, la Dirección Antinarcóticos de la Policía Nacional ha detectado tres cargamentos de cocaína que pretendía salir hacia Amberes (Bélgica). Los anteriores fueron ubicados en el Puerto de Cartagena. Las investigaciones tratan de establecer si guardan algún tipo de relación; y buscan identificar a la organización criminal responsable del envío.