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José Elías Melo, expresidente de Corficolombiana, una empresa filial del Grupo Aval, fue condenado el pasado lunes por un juez de la República que consideró que Melo sí supo de uno de los sobornos que pagó la multinacional Odebrecht en Colombia para quedarse con el contrato de la obra de la Ruta del Sol II. Este miércoles, Melo insistió en su inocencia. “No supe, no participé”, señaló en una entrevista concedida a Blu Radio.
Melo fue encontrado responsable de los delitos de cohecho e interés indebido en la celebración de contratos, por conocer y haber aprobado el soborno de $USD 6,5 millones que la constructora brasileña le entregó al exviceministro de Transporte, Gabriel García Morales, quien estaba a cargo del extinto INCO (la antigua agencia de Infraestructura, hoy ANI). Esta coima, según la Fiscalía, se dio con el fin de que Consol (concesionaria integrada por Corficolombiana, Odebrecht y el grupo Solarte) se quedara con la construcción de ese corredor vial.
(Lea aquí: Condenan a José Elías Melo, el protagonista de más alto perfil en el caso Odebrecht).
“Ni participé ni supe de las actuaciones indebidas de los señores brasileros y por esa razón me declaré inocente”, dijo Melo. En la entrevista, el ex alto directivo aseguró que está demostrado que los pagos los hizo Odebrecht y que no hubo intermediación ni participación de Corficolombiana para hacerlos. Además, negó que se haya reunido con Luiz Bueno, expresidente de Odebrecht en Colombia, para pactar pagos. "Las reuniones fueron absolutamente normales para llevar a cabo un negocio: participar en la licitación del proyecto Ruta del Sol. Nunca tuve una reunión fuera de oficinas, nunca fuera de lugar y eso fue todo", señaló.
Melo explicó que el hoy fiscal Néstor Humberto Martínez era asesor del Grupo Aval y que cuando toda la investigación inició, se sintió "insignificante", teniendo en cuenta los intereses en juego. "Y siento que hubo una actividad de la Fiscalía extraordinariamente veloz y contundente con el propósito de lograr que José Elías Melo cayera en la cárcel y sí, lo lograron. Ese esfuerzo tan grande de llevarme a la cárcel no se qué propósitos tenía pero el caso es que lo lograron y con eso le dieron tranquilidad a la gente de que había imparcialidad".
"Él (Néstor Humberto Martínez) era un asesor externo. Si el me cree a mi o no no tengo ni idea. Él trabajó en el proyecto de la Ruta del Sol. Su preferencia personal no la conozco. Para nosotros era una persona de gran confianza", dijo Melo a Blu Radio. Ahora, preguntado sobre Luis Carlos Sarmiento, directivo del Grupo Aval, Melo indicó que no habría trabajado con él si fueran capaces de cometer actos irregulares. “Yo no habría trabajado con una persona que hace esas cosas. Si yo no las hice y yo no trabajaría con una persona que hiciera esas cosas, pues el honor personal del doctor Sarmiento, por cuenta mía, no está expuesto. Si yo pensara que él va a hacer una u otra cosa indebida, ni me hubiera arrimado por ahí”, dijo
Por ahora, Melo permanecerá libre mientras se da a conocer el monto de la condena en su contra, el próximo 29 de abril. Por ahora, mientras ese momento llega, el exdirectivo del Grupo Aval no podrá salir del país. La Fiscalía, durante la diligencia, le solicitó al juez que Melo no sea beneficiado con prisión domiciliaria, sino que la cumpla en una de las cárceles que “ponga a disposición el Inpec”. A su vez, el ente investigador pidió que sea condenado a una pena entre los 76 y 133 meses de prisión, a pagar entre 96 y 181 salarios mínimos y que sea inhabilitado por 136 meses para ejercer cagos públicos.
(También: Fiscalía aseguró que José E. Melo "dio visto bueno" al soborno de Odebrecht en Ruta del Sol).
El fallo condenatorio
Durante la audiencia de lectura de sentido de fallo, el juez del caso señaló que “Las reuniones que tuvieron Luiz Bueno (expresidente de Odebrecht en Colombia) y Melo tenían un fin específico: que no era otro que, sin importar si tenían que corromper al adjudicatario de la obra para ganar la licitación, lo harían, como en efecto lo hicieron (...) Es un hecho demostrado que Melo conocía de los pagos y permitió que se realizaran.”
A su vez, el juez del caso manifestó que “para este despacho no es de recibo lo manifestado por la defensa de Melo cuando señala que Odebrecht actuó solo. La firma brasilera consolidó relaciones que le abrieran camino en el sector y por eso buscó a Corficolombiana del Grupo Aval, una organización de prestigio a nivel nacional. Como socios hablaron y planearon llevar el plan a un fin, que era el de corromper el concurso licitatorio”.
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Durante la etapa de juicio también salió a relucir el contrato por medio de cual Odebrecht canalizó el soborno de 6.5 millones de dólares. El contrato fue firmado el 10 de julio de 2010 entre la sucursal de constructora brasilera en Colombia y la empresa española DCS Management. Luiz Bueno durante el juicio señaló que el contrato, que tenía como objetivo asesorar a la constructora en la presentación de la propuesta de adjudicación de la Ruta del Sol 2, fue un convenio simulado para justificar la coima.
Sobre lo anterior el juez señaló que Melo no cumplió con sus funciones, no indagó ni se preocupó sobre lo que en su momento le comunicó Mauricio Millán Drews, quien se desempeñó como representante de Corficolombiana en el consorcio Consol y del cual hacía parte Corficolombiana por medio de Episol. El actual funcionario de Corficolombiana indicó en el juicio que mientras era miembro de la concesionaria a cargo de la Ruta del Sol 2 se percató de la existencia del contrato por donde pasaron los sobornos de Odebrecht.
“Era una suma considerable la que se dio en el contrato irregular por donde pasó el soborno de 6.5 millones de dólares con destino a Gabriel García Morales. Con lo anterior se evidencia que Odebrecht pagó la coima en un primer momento como lo señaló Luiz Bueno, con conocimiento y anuencia de Melo acosta”. Y añadió que “ese contrato es de papel, ficticio e irreal no se pudo comprobar que se cumplió ese contrato porque no existe soporte documental del mismo”.