Ochenta obras precolombinas fueron incautadas dentro del proceso de extinción de dominio que adelanta la Fiscalía en contra de Juan Carlos Ortiz y Tomás Jaramillo cerebros del descalabro del Fondo Premium de Interbolsa. Los bienes arqueológicos quedaron a cargo del Instituto Colombiano de Antropología e Historia.
Según señaló el ente investigador, fueron encontradas 80 piezas precolombinas dentro de los apartamentos de Ortiz y Jaramillo, ubicados en el centro de la ciudad de Bogotá. Funcionarios del Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH), en efecto, pudieron comprobar que no existen certificados ni permisos legales que autoricen la tenencia de dichos objetos.
El ente investigador, señaló también que los objetos pertenecen a diferentes regiones del país y, en su mayoría, se ubican cronológicamente 500 años antes de cristo. Entre los elementos recuperados se encuentran: urnas funerarias, figuras procedentes de la zona Tumaco; silbatos indígenas con apliques de las comunidades del Tairona; copas con pedestal de la cultura Caribe y estatuas procedentes del suroccidente de Colombia, entre otros.
(En imágenes: Los apartamentos, la finca y la casa que les quitaron a los cerebros del desfalco de Interbolsa)
“Las 80 piezas precolombinas, de incalculable valor comercial, volverán a manos del Estado por ser patrimonio histórico y cultural de los colombianos”, así lo señaló la Fiscalía.
Dentro del proceso de busqueda de los bienes que pertenecen a Juan Carlos Ortiz y Tomás Jaramillo, en febrero de este año, fue incautado un lujoso yate adquirido en el año 2010 por un valor de US$377 mil dólares ($1.436 millones en esa época). Hasta el momento, el ente investigador ha encontrado propiedades avaluadas en más de $38.000 millones.
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Juan Carlos Ortíz y Tomás Jaramillo ya aceptaron su responsabilidad por los delitos de manipulación fraudulenta, estafa agravada y concierto para delinquir, y fueron condenados a cinco años y nueve meses de prisión. Actualmente, continúa el proceso penal por captación masiva y habitual de dineros. Este descalabro bursátil empezó a ser investigado en 2012, como consecuencia de toma de posesión de la sociedad comisionista por parte de la Superintendencia Financiera.
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Estas fueron algunas de las piezas recuperadas: