Hace 20 años, cuando salía de dictar clase en la Universidad Sergio Arboleda, fue asesinado el dirigente conservador, Álvaro Gómez Hurtado. Ese mismo día, el gobierno Samper decretó la conmoción interior. Luego de las lamentaciones de siempre, las autoridades se comprometieron a esclarecer el magnicidio, pues en ese momento Gómez era el principal opositor del gobierno, a raíz del escándalo del proceso 8000. En la actualidad, el caso sigue en la impunidad aunque la Fiscalía indaga nuevas hipótesis.
En su momento, por informes de Policía, la primera averiguación fue contra un grupo de individuos de Sincelejo (Sucre), en virtud de un declarante que después terminó investigado por falso testimonio. Los detenidos fueron absueltos meses después, pero uno de ellos, Héctor Paúl Flórez, fue condenado a 39 años de cárcel. Después fue detenido otro grupo de delincuentes comunes, a quienes se les atribuyó responsabilidad en el atentado al abogado Antonio Cancino.
Tampoco esta línea de investigación resultó sólida y luego se supo que, como el capítulo anterior, fue un segundo intento por desviar la verdad, esta vez motivada en falsas acusaciones de miembros de la Sijín. Entonces cobró vida la pesquisa que se publicitó como determinante. A raíz de una supuesta llamada anónima que reportó a la Policía la presencia de sospechosos en la zona donde se cometió el magnicidio de Gómez Hurtado, se inició una investigación contra varios militares.
El vehículo campero de placas LIW-033, resultó asignado a la Brigada XX de Inteligencia Militar, por lo cual, con el curso de los días, la Fiscalía detuvo a varios suboficiales o civiles del cuerpo de inteligencia, así como al coronel Bernardo Ruíz Silva. Esta hipótesis sobre el ‘Grupo Cazadores’ siempre se enmarcó en el contexto de que hacía parte de la intentona golpista contra el entonces presidente Samper. No obstante para el año 2001, todos los procesados ya estaban absueltos.
Cuando todo marchaba hacía la impunidad total, la familia Gómez Hurtado decidió hacer su propia investigación y con apoyo de la justicia y en base a declaraciones de paramilitares y narcotraficantes confesos y detenidos, surgió un nuevo capítulo judicial. Esta vez para tratar de demostrar que el magnicidio fue perpetrado por el Cartel del Norte del Valle en asocio con agentes del Estado, para evitar que en un eventual golpe a Samper, el dirigente conservador, al frente de un nuevo gobierno, actuara contra ellos.
En esa nueva línea de investigación, aparecieron dos personajes claves: el político vallecaucano Ignacio Londoño Zabala, como supuesto enlace entre el gobierno Samper y los capos del Cartel del Norte del Valle, y el coronel Danilo González, un corrupto oficial de la Policía que al tiempo que manejaba importantes misiones de la institución, era un aliado de la organización mafiosa. A partir de 2008, varios narcotraficantes y paramilitares fueron fortaleciendo esta hipótesis judicial.
En medio de sus averiguaciones, la familia Gómez fue relacionando varios episodios criminales más, antes y después del crimen de Álvaro Gómez, para insistir en que la Fiscalía debía trabajar en esta línea. Además, una y otra vez, le han solicitado al ente investigador, que el caso sea declarado como de lesa humanidad para evitar su prescripción. Las investigaciones en este capítulo judicial, han contado con la colaboración de la justicia norteamericana, en especial para la rendición de testimonios.
Sin embargo, hace tres meses, fue asesinado el personaje que se consideraba clave en este expediente: Ignacio Londoño. Hace una semana, la Fiscalía declaró que el crimen de Gómez solo prescribirá hasta el año 2022, y abrió una inédita línea de trabajo, al ordenar una versión libre al general (r), Rito Alejo del Río, contra quien existen otros procesos por nexos con el paramilitarismo. También se le relaciona con el caso Jaime Garzón. Su vinculación al caso Gómez, retoma la tesis de la Brigada XX de Inteligencia.
En criterio de la familia Gómez, recogiendo una frase del exministro Fernando Botero, “el asesinato del dirigente conservador fue un crimen de Estado”. En el libro “¿Por qué lo mataron?, escrito por Enrique Gómez, se detalla el trabajo que sigue desarrollando la familia para aclarar el caso. Hace dos semanas, el excongresista Pablo Victoria, lanzó su libro “Memoria de un golpe”, con aportes inéditos sobre este oscuro episodio de continua en la impunidad después de 20 años de largo silencio.
Miércoles 16 de agosto
A las 8 y 25 de la mañana, en la avenida Circunvalar con calle 74 en Bogotá, fue asesinado Darío Reyes Ariza, quien había oficiado como conductor de Horacio Serpa y, según Santiago Medina, se aprestaba a rendir testimonio por la presencia de dineros del narcotráfico en la campaña Samper Presidente.
Miércoles 27 de septiembre
En cercanías de la Universidad Externado, sicarios atentaron contra el abogado Antonio Cancino, quien se desempeñaba como defensor del presidente Samper. Dos de sus escoltas, agentes del DAS, perdieron la vida. Jaime Acevedo Quimbayo y Ancízar Gutiérrez Cuevas.
Jueves 2 de noviembre
Al frente de la Universidad Sergio Arboleda, al norte de Bogotá, en el mismo atentado en que murió a tiros el dirigente conservador Álvaro Gómez Hurtado, perdió también la vida su amigo y asistente José del Cristo Huertas Hastamorir, que lo acompañaba en ese momento.
Viernes 2 de febrero de 1996
En el barrio El Edén, al noroccidente de Bogotá, fue asesinada Elizabeth Montoya de Sarria, más conocida como “La Monita Retrechera”, donante de la campaña Samper Presidente. También se aprestaba a dar declaración en las investigaciones del llamado Proceso 8.000.
Viernes 16 de febrero de 1996
En extrañas circunstancias fue asesinado el médico Germán Cifuentes Vivas, hijo del entonces general Ricardo Emilio Cifuentes, comandante de la Segunda División del Ejército, quien días antes había renunciado públicamente argumentando que Samper no merecía su respaldo.
Lunes 19 de febrero de 1996
En la carrera 19 con calle 27 en Bogotá fueron asesinados Clara Valencia Linares y Hugo Roberto Otálora. La primera era investigadora de la Procuraduría, que averiguaba anomalías de agentes de la Dijín relacionados con asesinatos. El segundo era su esposo.
Martes 12 de mayo
En la calle 118 en Bogotá, sicarios asesinaron al exministro de Defensa, general (r) Fernando Landazábal. El vehículo en que se movilizaban los sicarios había sido robado en Armenia (Quindío). Según el excongresista Pablo Victoria, días atrás le había dicho que ya sabía quién había asesinado a Álvaro Gómez.
Miércoles 15 de septiembre
En la Universidad Nacional, cuando se dirigía a un salón de la División de Contaduría, fue asesinado el excomisionado de Paz Jesús Antonio Bejarano. Tiempo después se supo que había declarado en la investigación por el magnicidio de Gómez Hurtado.
29 de marzo
En el municipio de Jamundí (Valle) fue asesinado el exrepresentante liberal Jairo Chavarriaga Wilkins. El excongresista, oriundo de Cartago (Valle), fue condenado por las investigaciones del Proceso 8.000 y se dijo que fue muy cercano al cartel del norte del Valle.
17 de agosto
En una habitación de la Clínica de Los Remedios en Cali fue acribillado el administrador de empresas Carlos Hernando Maya Hoyos, quien había sido uno de los principales testigos contra narcotraficantes del cartel del norte del Valle y estaba condenado por enriquecimiento ilícito.
25 de marzo de 2004
Cuando ingresaba a su oficina, al norte de Bogotá, fue asesinado el coronel (r) de la Policía Danilo González, quien hizo parte de Los Pepes en la persecución contra Pablo Escobar, y terminó siendo uno de los hombres claves de los capos del cartel del norte del Valle.
19 de abril
En una cafetería de Armenia (Quindío) fue asesinado a tiros el exrepresentante a la Cámara y abogado de capos del cartel de norte del Valle, Carlos Oviedo Alfaro. El abogado había purgado una condena por doble asesinato y por el delito de enriquecimiento ilícito.
7 de enero de 2010
En el baño de una discoteca de Cartago (Valle), durante una ruidosa celebración, fue asesinado Diego Buitrago Gómez, sobrino e hijo adoptivo del capo del narcotráfico, Hernando Gómez Bustamante, alias “Rasguño”, quien cinco días después testificó en el caso Gómez Hurtado.
Jueves 15 de julio de 2010
En una calle de Armenia fue asesinado el exviceministro Rommel Hurtado, quien pagó condena por el Proceso 8.000. En una caja fuerte en su casa, durante un allanamiento, fueron encontrados documentos relacionados con el supuesto intento golpista contra el presidente Samper.
12 de diciembre
En el barrio El Troncal de Cali fue asesinada la modelo Ángela Villalobos Cano, hija del confeso narcotraficante del norte del Valle, Víctor Patiño Fómeque. El crimen se cometió un día antes de que Patiño testificara en el caso Gómez Hurtado. Ante lo sucedido, Patiño se negó a declarar.
Jueves 27 de diciembre
Cuando viajaba entre Armenia y el municipio de La Tebaida (Quindío) fue asesinada la denominada reina del cartel del norte del Valle, Lorena Henao Montoya, hermana de los narcotraficantes Orlando, Arcángel y Fernando Henao. Había sido condenada por varios delitos.
22 de junio
En una discoteca de Cartago (Valle) fue asesinado Davinson Gómez Ocampo, alias “El Gordo”, primo del extraditado narcotraficante del norte del Valle, Hernando Gómez Bustamante, alias “Rasguño”. El personaje acababa de regresar de Estados Unidos, donde estuvo preso por narcotráfico.