Ambientalistas navegaron el contaminado río Medellín para salvarlo

Cerca de 80 personas navegaron las aguas del río Medellín pidiendo su recuperación / EFE / L. E. Noriega

Ayer varios ambientalistas realizaron una hazaña impensable: navegar el contaminado río Medellín que atraviesa gran parte de la ciudad antioqueña. El recorrido, que duró casi dos horas y se extendió por cinco kilómetros, buscaba reclamarles a las autoridades la recuperación de las aguas del afluente.

Unas 30 embarcaciones como botes inflables, kayaks y neumáticos a bordo de 80 hombres y mujeres comenzó la travesía a las 9:30 de la mañana. La aventura ecológica, denominada por sus organizadores “Naveguemos el río” era la manera de seguir soñando con un río navegable y recreativo, como dijeron organizadores de la actividad a los medios locales.

“Es necesario que tengamos una entidad fuerte, presupuesto y trabajo pedagógico llevado a las escuelas”, dijo a Efe Verde Guillermo Rojo, organizador de la actividad y miembro del Club Amigos del Río Medellín.

Este paseo por el río se realizó bajo la supervisión de socorristas y con la colaboración de lugareños. Además, conmemoraba los 25 años de la primera navegación por el río Medellín. Sin embargo, algunos médicos advirtieron los riesgos de meterse al río.

De hecho, el médico gastroenterólogo, Luis Felipe Franco, le dijo al periódico El Colombiano que los participantes “se exponen a una infección intestinal severa”. Uno de los activistas del evento, el comediante, Crisanto Vargas “Vargasvil”, aseguró a ese mismo medio que “no hay derecho que todavía estén tirando colchones, animales, todos los desechos de las casas, es culpa de la gente, pero también del mismo gobierno porque hay que educar”.

Con los coros “salvemos el río”, el anhelo de estos ambientalistas es que los habitantes de esta ciudad y sus alrededores puedan navegar, tomar el sol en sus orillas y hasta pescar en el río. Creen que esto es posible con políticas de recuperación efectivas.

“Este río mide 100 kilómetros, y si es utilizado como medio de navegación sería el escenario más grande que tendríamos para recreación y deporte”, sostuvo el organizador del evento.

De acuerdo a los informes de las autoridades ambientales del Valle de Aburrá, en los últimos dos años se han registrado más de 150 vertimientos en el río Medellín. Sumado a esto, los residuos industriales y químicos han llegado a alterar en varias oportunidades el color del río y el estado del agua.

La puesta en funcionamiento, en el segundo semestre de 2017, de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales (PTAR) del municipio de Bello, cercano a Medellín, permitirá el manejo de las aguas residuales y descontaminar el río por el que navegaron hoy decenas de ambientalistas.