Japón manifestó este lunes, 26 de noviembre, su intención de neutralizar la huella de carbono para el 2050. Las cartas están sobre la mesa y aunque aún no está definido el plan para llevarlo a cabo, desde ya se sabe que representará un gran reto debido a la dependencia de este país al carbón.
“Declaro que vamos a reducir (las emisiones) de gases de efecto invernadero a cero de aquí a 2050” apuntando “a una sociedad neutra en carbono”, afirmó el primer ministro japonés Yoshihide Suga en su primer discurso de política general ante el Parlamento desde su llegada al poder en septiembre.
El plazo de 2050 concreta los compromisos de Japón para combatir el cambio climático. Un país que hasta el momento solo había manifestado su intención de llegar a una neutralidad de carbono en la segunda mitad del siglo XXI. Este nuevo objetivo sitúa al país asiático en la misma línea que Europa y Reino Unido, y una década antes que China, que el mes pasado estableció el tope para 2060.
El ministro también agregó que Japón promoverá la utilización de energías renovables y la energía nuclear, teniendo en cuenta todos los consensos de seguridad, al recordar el accidente nuclear de Fukushima en 2011 que provocó la suspensión de la actividad de los reactores y aumentó la dependencia con relación a energías fósiles, como el carbón.
“Necesitamos cambiar nuestra mentalidad y tomar medidas proactivas contra el calentamiento global que generen cambios en las estructuras industriales, así como en la economía y la sociedad, lo que conducirá a un gran crecimiento”, concluyó Suga.
En junio de 2019, el Gobierno de Abe diseñó un plan para minimizar la emisión de estos gases hacia 2050, potenciando fuentes de energía como la solar y la eólica, pero ese programa no establecía niveles cero en ese año. Sí establecía, no obstante, incrementar la generación de energía renovable hasta alcanzar entre el 22 y el 24 % del total para 2030.
Las reacciones a esta decisión de Japón no se hicieron esperar. Ante el anuncio de este lunes, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien agregó a través de su cuenta de Twitter que “todas las naciones desarrolladas deberían actuar por su cuenta para detener el cambio climático”.
I warmly welcome 🇯🇵 to the goal that all developed nations should set for themselves to stop climate change.
— Ursula von der Leyen (@vonderleyen) October 26, 2020
🇯🇵 is a good friend and ally and we look forward to working with them towards net zero emissions in 2050. The world is coming together for the climate.
De igual forma, Frans Timmermans, responsable por el ambicioso Acuerdo Verde de la Unión Europea señaló que Japón “mostró liderazgo global” y agregó que es un “enorme paso” para la acción mundial contra el cambio climático.
Finalmente, el secretario de la ONU, Antonio Guterres dijo que se trataba de un “desarrollo positivo muy significativo” ya que por primera vez Japón habla de medidas concretas.
Japón, tercera economía mundial, firmante del Acuerdo de París de 2015, era en 2018 el sexto emisor de gases de efecto invernadero del mundo, según la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
El país suele ser criticado por su política de construcción de nuevas centrales de carbón en su territorio, y también por financiar proyectos en el extranjero, como en el sudeste asiático.
Las 140 centrales de carbón representan alrededor de un tercio de su producción de electricidad. El carbón es la segunda fuente de producción de electricidad más importante, después del gas natural licuado (GNL), cuyas instalaciones suministran el 38% de la electricidad del país.