Luego de realizar diversas investigaciones y de analizar los monitoreo realizados sobre las áreas de mayor deforestación en la Amazonia colombiana, la Fiscalía General de la Nación logró identificar que en el predio La Esmeralda deforestaban de manera ilegal. (Lea: Las órdenes judiciales que buscan frenar deforestación en los parques Tinigua y Los Picachos)
La finca está ubicada en el Parque Nacional Natural Tinigua, en inmediaciones de la Serranía La Macarena y la cordillera Oriental. Este es el parque nacional que registró el año pasado la tasa más alta de deforestación.
De acuerdo con la Fiscalía, Vidal Rojas Herrera era el responsable de que en este predio se auspiciara la tala indiscriminada de bosque y se adecuara un área de 1.139 hectáreas para la cría y cuidado de ganado, actividades que están prohibidas en zonas de reserva forestal y de especial protección ambiental. (Puede leer: ¿Las áreas protegidas sirven para prevenir la deforestación?)
“Vidal Rojas Herrera vendió más 21 mil cabezas de ganado en dos décadas y podría albergar 500 semovientes en Tinigua, en un año. Fue capturado por la Policía Nacional en San Vicente del Caguán (Caquetá) y una fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos le imputó los delitos de ilícito aprovechamiento de los recursos naturales, invasión de área de especial importancia ecológica agravado e incendio; asimismo, solicitó la imposición de medida privativa de la libertad en el lugar de residencia”, explicó la Fiscalía en un comunicado.
Además de la captura de Rojas, un juez de control de garantías ordenó la destrucción de la casa finca, el corral ganadero y otras adecuaciones hechas en el Parque Nacional Natural. De acuerdo con la Fiscalía, “La Esmeralda generó una fractura del ecosistema permanente, persistente e irreversible; afectó la oferta hídrica, ahuyentó y expuso la fauna silvestre, y transformó las características del suelo”. (Le puede interesar: Se disparó la deforestación en la Amazonia colombiana (otra vez))