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Después de que los ciudadanos Lucas Andrés Quintero Velásquez y Luis Guillermo Mesa García interpusieran una demanda contra el Área Metropolitana y el Municipio de Medellín, exigiendo una mejor calidad del aire, el Tribunal Administrativo de Antioquia ordenó a estas entidades que “adopten las medidas cautelares urgentes para proteger la salud de la población debido a la precaria calidad del aire en esta subregión”, según indicó Caracol Radio.
Puntualmente, el fallo resuelve que se decreten medidas cautelares tendientes a proteger preventivamente los derechos e intereses colectivos de los habitantes del Valle de Aburrá. (Lea también: Medellín, al borde de una contingencia ambiental, otra vez)
Igualmente, señala que tanto el Municipio de Medellín como el Área Metropolitana deben asegurarse de que exista una verificación constante del monitoreo de la calidad del aire en distintas áreas, así como hacer un trabajo con otras entidades para tomar medidas preventivas antes de que los reportes del aire pasen a color naranja (dañino para la salud de grupos sensibles). Es decir, “que en ninguna estación de monitoreo de la calidad del aire se reporte que éste pueda llegar a ser dañino para la salud de grupos sensibles (naranja), ni dañina para la salud (rojo), ni muy dañina para la salud (morado) ni sea peligrosa (marrón)”.
En caso de que esta situación no se cumpla y se sobrepasen estos niveles, según el fallo, se deben “adoptar en forma inmediata las medidas de mitigación de los efectos perjudiciales y de restauración a un nivel que no sea dañino para la salud de grupos sensibles o para la salud (Amarillo)”.
Otra de las órdenes que ambas entidades deben cumplir es avisar constantemente a los ciudadanos sobre la calidad del aire, ya sea por medio de las redes sociales o sus respectivas páginas web. Los ciudadanos, por su parte, deben consultar frecuentemente el monitoreo de la calidad del aire para tomar decisiones personas como montar bicicleta o tomar transporte público.
Finalmente, los magistrados del Tribunal advierten que “estas decisiones se adoptan de manera transitoria mientras se demuestra al interior del proceso que se han tomado medidas por parte de las accionadas, que permitan que la calidad del aire en el Valle de Aburrá se mantenga en un promedio normal, que no afecte la salud de las personas, en especial aquellas que pertenecen a grupos sensibles”.