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La polémica por la tala de árboles en Envigado para construir una línea de Metroplús continúa. Esta mañana, y a pesar de una sentencia judicial y la presión de colectivos ciudadanos, comenzó la tala de 133 árboles del corredor arbóreo conocido como Túnel Verde de Envigado por orden del nuevo alcalde del municipio, Braulio Espinosa, que lleva cuatro días ejerciendo el cargo.
Colectivos ambientalistas como Colectivo Túnel Verde y Aire Medellín se han opuesto a la tala para la construcción de un tramo del Metroplús desde que se anunció al proyecto, aduciendo que era necesario un sistema de transporte que no generara daños ambientales al corredor de árboles. "Se han hecho dos talas esta semana. El 31 de diciembre talaron 38 árboles y gracias a la reacción de la comunidad y del Ministro de ambiente se logró suspender la tala. Pero aprovecharon puente de reyes, cuando la gente descansa, y al momento han talado 30 árboles. Tienen permiso para 133, pero ese permiso incumple lo dicho por el Tribunal Administrativo de Antioquia, por el Consejo de Estado, y lo dicho en distintos espacios de diálogo. Tanto el alcalde anterior, Esteban Salazar, como el actual, se comprometieron a no talar los árboles hasta que no se hiciera una mesa de concertación", dice Camilo Quintero, parte del Colectivo Túnel Verde.
Historia de la pelea
La pelea por la defensa de los árboles del túnel de árboles que conecta Envigado con Medellín comenzó en 2013, cuando los ciudadanos Juan Carlos Valencia, Fabio Mauricio Martínez, Juliana Vélez Echeverri, Alejandro Jiménez Ospina y Camilo Quintero Giraldo interpusieron una acción popular ante el Tribunal Administrativo de Antioquia, respaldada por 30.000 firmas, en contra de Metroplús S.A., Corantioquia, el muncipio de Envigado y AIA, que habían adjudicado un contrato para construir el tramo 2B del Metroplús. Esto implicaba la tala de 172 árboles, y gracias a esta acción judicial, se suspendió la tala.
Luego, el pasado mes de agosto, el Área Metropolitana del Valle de Aburrá ratificó la decisión de dar permiso para la tala de los árboles ubicados en la carrera 43ª, entre el sector de La Frontera y el Colegio Colombo Británico. Y dio un año para que las instituciones correspondientes cumplieran con la disposición. Además de la tala, se ordenó podar 32 árboles y reubicar 30.
Los demandados apelaron la decisión y en febrero de 2018, el Consejo de Estado volvió a fallar a favor del colectivo y de los árboles del Túnel Verde. Pero el fallo no absolvió a los árboles de una posible tala, sino que determinó que las instituciones no obraron según la ley al momento de aprobar la licencia para el aprovechamiento ambiental.
Así, la Alcaldía de Envigado anunció que comenzaría la tala de 133 árboles en diciembre de 2019. Para el Colectivo Túnel Verde, la decisión es problemática por seis razones:
-No es transparente, ni ético, ni adecuado ejecutar la tala en plena Navidad y vacancia judicial. Desde La Frontera hacia el norte no hay compra de predios, ni recursos económicos, ni material rodante, ni habrá terceros carriles. Un corredor enmarcado dentro de los límites jurisdiccionales de Envigado es un total sinsentido.
-Desde hace más de 6 años hay una resistencia ciudadana pide ser escuchada. No nos oponemos al transporte público, queremos uno que proteja los corredores verdes y que esté conectado con las necesidades de las personas. Queremos un sistema de transporte que responda a necesidades técnicas y no a caprichos políticos.
-Al no existir recursos para completar la obra del Tramo 2B, ni para la continuidad del corredor en el municipio de Medellín, esta tala no solo es inadecuada sino antitécnica, ya que desconoce la integridad del proyecto y la incapacidad financiera que en este momento impide el desarrollo de la totalidad del mismo, pudiendo incurrir en detrimento patrimonial.
-El proyecto de corredor circunscrito entre los límites del municipio de Envigado no resuelve las necesidades de viaje de habitantes y visitantes del sur del Valle de Aburrá, y carece de sentido operativo.
-El permiso del AMVA comete los mismos errores de Corantioquia y es sobre los mismos árboles que protegió una sentencia judicial. Permitir la tala traería consecuencias penales (fraude a resolución judicial, artículo 454 del Código Penal), fiscales y disciplinarios.
La Alcaldía decidió suspender la tala tras las presiones de colectivos ambientalistas el 23 de diciembre de 2019, y aseguró que no se cumplían todos los requisitos para esta tarea y quedaba indefinidamente pospuesta. Unos días después, y tras una mesa de diálogo en donde el Ministerio de Ambiente fue mediador, la decisión de suspender la tala hasta nuevos diálogos con los ciudadanos. Pero apenas dos semanas después, se dio inicio. A esta hora, algunos ciudadanos se pararon debajo de los árboles que estuvieran talando para evitar que los corten. Por ahora, las obras continúan.
A través de un comunicado, la Alcaldía de Envigado dijo: “Se llegó a un número definitivo de permiso de aprovechamiento forestal de 70 árboles y de otros 63 individuos arbóreos menores de 10 centímetros. De lo exigido por el Área Metropolitana del Valle de Aburrá (establecer como reposición 286 individuos arbóreos, de los cuales 173 -más del 50 por ciento - deben establecerse en el área de influencia directa), el municipio de Envigado ya ha sembrado más de 113 individuos correspondientes a 69 especies diferentes, lo cual generará mayor biodiversidad, beneficios ecológicos, mayor aporte de alimento, hábitat, percha y tránsito para la fauna silvestre”. También precisó que la suspensión de la obra durante más de seis años significa un sobrecosto de 14.000 millones de pesos, que deberá aportar en su totalidad el municipio de Envigado, según El Colombiano.