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En la vereda Pueblo Nuevo, del municipio de Tumaco, en Nariño, se presentaron enfrentamientos entre la Fuerza Pública y habitantes de la comunidad que vienen desarrollando un trabajo de sustitución voluntaria de cultivos de uso ilícito en esta zona.
Según denuncias preliminares hechas por la Coordinadora Nacional de Cultivadores de Coca, Marihuana y Amapola, Coccam, que acompaña el proceso de erradicación de estos cultivos en el país, en la mañana de este jueves uniformados habrían llegado a la vereda con drones para fumigar la zona, violando acuerdos previos con la comunidad. Ante esta situación los campesinos habrían reclamado a los oficiales quienes respondieron de manera violenta usando gases lacrimógenos, balas de goma y las culatas de los fusiles.
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Sin embargo, desde la Dirección Antinarcóticos de la Policía afirmaron que en esta zona no tienen drones de fumigación y que el artefacto que acompañaba la presencia de los uniformados era de grabación. Además, señalaron que los oficiales que llegaron a la zona eran 20 mientras los campesinos que llegaron a reclamar a las autoridades eran alrededor de 40 armados con machetes. Según el relato de la entidad, los habitantes del sector iban a agredir a los oficiales, razón por la cual estos acudieron al uso de gases lacrimógenos.
El hecho se produce justo un día después de que la comunidad sostuviera una reunión con las autoridades, así como con delegados de derechos humanos para analizar la situación. Allí se habría acordado continuar con la erradicación manual, como se venía haciendo, dado el avance que presentan en 20 veredas de este municipio en el Plan Nacional Integral de Sustitución de Cultivos de Uso Ilícito, PNIS. Los habitantes de esta zona ya van en el segundo pago que establece este plan para quienes certifiquen haber erradicado los cultivos.
La Policía manifestó que fue precisamente la comunidad la que solicitó la presencia de las fuerzas policiales para la erradicación de los cultivos pues habían señalado que recibieron amenazas de actores armados que se oponen al programa de sustitución de cultivos.
La confrontación terminó de manera conciliada cuando uno de los líderes de la comunidad se acercó para dialogar con los uniformados y les manifestó que el rechazo de la población había sido por el dron pero que sí han solicitado presencia de la Fuerza Pública para el proceso de erradicación.