Hacia las 11:30 de la noche del viernes varios sonidos de bala alteraron la tranquilidad de los habitantes del municipio de Hacarí, Norte de Santander.
Hombres armados llegaron hasta la casa del personero de esa localidad, Diógenes Quintero Quintero, y le dispararon a la puerta y, por una ventana, hacia el interior del inmueble en al menos ocho ocasiones.
En ese momento, el representante del Ministerio Público no se encontraba allí, ya que había viajado desde temprano a Ocaña a realizar algunas diligencias. Quintero Quintero, contactado por El Espectador, dijo: “es muy duro porque ni siquiera sé qué es lo que está pasando”.
El funcionario consideró la situación como grave ya que, a pesar de que ha recibido anteriormente algunas amenazas, estaba convencido de que el riesgo lo tenía era fuera del pueblo. “A mí me daba miedo era salir de allá”, señaló.
Por ahora el personero está a la espera de que algunos amigos le hagan averiguaciones sobre el hecho.
En la casa no había nadie y presume que los atacantes lo sabían por lo que recibe el hecho a manera de advertencia.
Diógenes Quintero, quien además es el presidente de la Asociación de Personeros del Catatumbo, tampoco ha contemplado la posibilidad de renunciar a su cargo y esperará a que haya claridad sobre la agresión.