Publicidad

Chocó quiere ser prioridad

El presidente Juan Manuel Santos realiza este lunes un consejo de ministros en Quibdó.

Wálter Arias
11 de marzo de 2012 - 10:12 p. m.

Esa misma región que el presidente Juan Manuel Santos elogió el 27 de agosto de 2011 por su “maravilla de riqueza”, al visitar el Parque Nacional de Utría, en los municipios de Bahía Solano, Nuquí, Alto Baudó y Bojayá, lo recibe hoy ávida de atención. Tras soportar un paro armado de ocho días, provocado por las Farc, autoridades y habitantes del Chocó esperan que la presencia del mandatario, quien viajará hoy a la zona, signifique de verdad un cambio tras una historia de abandono, pobreza y violencia.

Le pedirán que garantice inversiones para mejorar la seguridad, que apunte la fuerza del Estado hacia esa región para erradicar en gran medida la pobreza y que resuelva el problema de la falta de infraestructura. “Esperamos que esta visita sea el punto de partida para darle prioridad a un departamento que no ha generado la atención debida”, le dijo a El Espectador Luis Gilberto Murillo Urrutia, gobernador del Chocó.

La atención, dice el mandatario, debe comenzar por una inversión sólida para el sur del departamento y por construir un batallón de alta montaña en Riosucio, municipio vecino a Panamá, ubicado al frente de la cordillera del Darién. Allí, según Cecilio Moreno, alcalde de la localidad, los grupos armados se disputan el territorio porque es un corredor para transportar armas y drogas.

Durante estos últimos ocho días, de paro armado, el comercio perdió $3.000 millones, informó la Cámara de Comercio de Chocó. El minero Camilo*, por ejemplo, perdió unos $40 millones porque las máquinas estuvieron paradas por falta de combustible y porque ni él ni los trabajadores pudieron transportarse. “Con este paro, ya son dos veces durante el último año que he debido suspender actividades”, dice.

El paro significó un hueco enorme para la economía más débil de Colombia, si se tiene en cuenta que el PIB del Chocó, según el Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría del Pueblo (SAT), es el más bajo del país y representa entre el 0,39 y 0,40 por ciento del PIB nacional.

En medio de esos problemas, el 82% de la población vive casi en la miseria. “Tenemos municipios como Alto Baudó, donde el 97% de la población vive con las necesidades básicas insatisfechas. Ése es el municipio más pobre del país”, dice el gobernador. El mandatario agrega que según el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Chocó requiere de 30 años para llegar a los niveles de la Bogotá de hoy.

Riosucio es un ejemplo de esas precarias condiciones de vida. Hace dos semanas no hay atención médica —dice el alcalde Cecilio Moreno— y los centros educativos y la red vial están en pésimas condiciones debido a que el pueblo permanece inundado tres veces al año. Las otras alternativas para que los campesinos saquen sus productos son los ríos, pero éstos están por encima del límite. “Por eso, uno de los temas que le queremos plantear hoy al presidente es el dragado de las bocas del Atrato”, dice Moreno.

Chocó, según el SAT, comenzó a ser un “territorio estratégico para el repliegue de tropas y para el tráfico de armas y pertrechos”, desde los años 70, cuando aparecieron por allí frentes del Eln, Epl, Erg y las Farc. El frente quinto de las Farc, uno de los más antiguos de esa guerrilla, se desdobló en los frentes 36 y 57. El primero se replegó hacia el Nudo de Paramillo y el segundo hacia los límites con Panamá.

El conflicto se agudizó a mediados de los 90 con la aparición de grupos paramilitares. Se extendió desde Urabá hacia el Bajo y Medio Atrato y hacia las vías que comunican al departamento con el resto del país. Se concentró en la cuenca del Atrato y los alrededores de los ríos San Juan y el Baudó, una zona que conecta al Pacífico con Antioquia, el Eje Cafetero y el Valle del Cauca. Allí surgió un corredor para traficar armas y drogas.

Después de eso, la Fuerza Pública aumentó su capacidad en Chocó. El 28 de julio de 2005 fue creada la Séptima División, adscrita a la Brigada IV. Y en 2007, dentro de esta nueva división, fue creada la Brigada XV del Ejército.

La seguridad, sin embargo, no ha mejorado notablemente y, coinciden el gobernador Murillo y el alcalde Moreno, hay un aire cargado de temor en toda la región. “Hace décadas venimos padeciendo atropellos. Por eso nos sorprende que sólo después de un paro armado el Gobierno venga a recorrer con sus ministros y sus hombres de la Fuerza Pública todo el departamento para hacer un diagnóstico. Nosotros estamos sobrediagnosticados. Ya se saben cuáles son los problemas de orden público, salud, educación y vías”, dice Moreno.

Más pie de fuerza para Chocó

El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, anunció este fin de semana que el Gobierno Nacional incrementará el pie de fuerza en Chocó para garantizar la seguridad de los ciudadanos a raíz del paro armado implementado por las Farc en el departamento.

“Iremos estableciendo intervenciones temporales o permanentes adicionales al pie de fuerza que ya tiene el departamento, por eso en estos días estaremos trayendo seguramente cerca de 300 policías para atender esta situación”, señaló Pinzón durante un consejo extraordinario de seguridad que se adelantó en Quibdó y al que asistieron los ministros del Interior, Germán Vargas Lleras, y de Agricultura, Juan Camilo Restrepo.

“Tenemos planes de orden nacional para implementar más el pie de fuerza de la Policía en 20 mil hombres, el pie de fuerza del Ejército en 5 mil y aumentar las capacidades, los medios, los helicópteros y los vehículos”, puntualizó.

* Nombre cambiado por petición de la fuente.

Por Wálter Arias

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar