Hoy cumple 118 años Sara Corzo, la mujer más vieja de Colombia

Según su cédula y los registros del ancianato de Barrancabermeja, en el que vive hace medio siglo, nació en 1901. Come y camina sola, pero está ciega. Para algunos es hasta Guinness World Record. ¿Conoce algún caso semejante?

María Hernández Cárcamo / mahernandez@elespectador.com
30 de marzo de 2019 - 12:00 p. m.
Lleva más de 40 años en el hogar geriátrico San Antonio en Barrancabermeja, Santander.  / Facebook: Edgar Rodao
Lleva más de 40 años en el hogar geriátrico San Antonio en Barrancabermeja, Santander. / Facebook: Edgar Rodao

"La vida es dura. Y dura". El famoso grafiti universitario de los años 80 del siglo XX hacía alusión a la compleja situación sociopolítica de la Colombia en la que arreciaba la violencia, la economía no despegaba, los narcos dictaban su ley a diestra y siniestra y, para colmo de males no había esperanza de que la situación mejorara. 

Era una época en la que la esperanza de vida estimada para los colombianos no pasaba de 64 años. De 30, en las zonas urbanas más azotadas por la violencia. Pero toda regla tiene su excepción y para ese entonces Sara Corzo ya había celebrado 84 cumpleaños. La pequeña y encorvada mujer, cuya cédula de ciudadanía señala que mide apenas un 1.35 metros de altura, cumple hoy, 30 de marzo, 118 años de edad, según lo atestiguan su documento de identidad, sus compañeros de vida en el Centro de Bienestar y Vida, Asilo San Antonio de Barrancabermeja (Santander), y hasta la directora de ese hogar geriátrico, María Eugenia Cuesta. 

Sarita, como la llaman sus allegados, vive junto a otros 62 ancianos en el centro de bienestar y goza de una buena salud. Hace 15 días perdió su vista, pero esto, según la directora del asilo, no ha sido impedimento para ella.

“Sarita come y camina sola. Lo único que tiene es que ya no habla como nosotras, le cuesta trabajo hacerse entender porque tiene un problema auditivo. Sabemos que quiere porque pone quejas y pelea”, dijo Cuesta a El Espectador.

Nació en Valledupar el 30 de marzo de 1901 y salvo por esos datos, registrados en la cédula de ciudadanía con hologramas con la que se identifica, es muy poco lo que se sabe de ella. Según su documento de identidad la cédula original fue expedida el 8 de julio de 1958, cuando aún eran en cartón y blanco y negro, muy diferentes al modelo moderno de código de barras de su actual cédula, curiosamente firmada por el ya fallecido ex registrador nacional, Iván Duque Escobar, padre del hoy presidente Iván Duque Márquez. 

De ser cierto el increíble dato sobre su edad, Sarita habría nacido más de seis décadas antes de la fundación del departamento de Cesar, del cual es capital su natal Valledupar. Habría llegado al mundo a la mitad de la guerra de los mil días y mucho antes de la primera y segunda guerras mundiales, la guerra fría, la caída del bloque soviético, el nacimiento de Internet, la caída de las torres gemelas y los procesos de descolonización africana por solo citar algunos de los hechos que marcaron el mundo tal y como lo conocemos. 

Antes, mucho antes, del nacimiento de las guerrillas, paramilitares, mafias de los narcos, escándalos de Obredecht, el asesinato de Jorge Eliecer Gaitán y otras muchas tragedias de la vida nacional. De hecho, Sarita nació antes que el mismo Gaitán. 

Sarita celebrará su cumpleaños número 118 al estilo del siglo XXI. Contará con parranda vallenata, mariachis, torta y muchos regalos por parte de la comunidad del sector. Claro está, sin dejar el toque religioso, pues desde que la conocen siempre conserva un rosario en su mano. 

Por increíble que parezca y según la directora del centro de bienestar, Sarita no sufre de diabetes ni de otros problemas de azúcar. Situación bien extraña no solo para el caso colombiano sino para el estándar internacional donde cada vez son más comunes las patologías asociadas a la inestabilidad del organismo para administrar la cantidad de glucosa en la sangre.

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"Sarita es una persona capaz de todo. Es muy saludable y juguetona", afirma María Eugenia Cuesta. 

No tiene familia conocida ni se sabe si dejó descendencia. Caso muy distinto al Ciriaca Zapata, cuya muerte en 2014, fue noticia nacional pues en ese momento, con 114 años de edad, era la persona más longeva de Colombia. Al momento de su fallecimiento doña Ciriaca, quien también era de Valledupar, tenía 11 hijos, 83 nietos, 78 bisnietos, 64 tataranietos y otros de quinta generación.

A inicios del siglo XX cuando el héroe nacional era Simón Bolívar y acababa de expedirse la Constitución de 1886 de Rafael Núñez, a otro lado de Colombia, especificamete en el Carmen de Bolívar, un 15 de octubre de 1903, nació María Teresa Rico Martínez, quien después de vivir el auge de la creación de los medios de comunicación en el país como El Espectador, murió a sus 114 años, el 25 de noviembre de 2017, cuando el país no pensaba en Bolívar sino en las cuatro victorias del ciclista Fernando Gaviria en el Giro de Italia. Al momento de su fallecimiento tenía cuatro hijos, 22 nietos, 26 bisnietos y cuatro tataranietos.

Si hay algo que ha existido, incluso antes de que Rosita naciera, ha sido el beneficio de la duda. Por esta razón, algunos piensan lo mismo sobre la japonesa Kane Tanaka, de 116 años de edad, quien es considerada por Guinness World Record como la mujer más vieja del mundo.

¿Conoce algún caso semejante?

Por María Hernández Cárcamo / mahernandez@elespectador.com

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