Luego de la liberación de Mauricio Ramírez, de 21 años y uno de los seis jóvenes que fueron reportados como desaparecidos en el bajo Cauca antioqueño, la Policía de ese departamento informó que este grupo de hombres está retenido por la banda criminal Los Caparros. Los jóvenes salieron desde Anserma (Caldas) con destino a Cartagena. Hacían su viaje pidiendo aventones a los conductores de camiones.
“Según nos manifiesta Mauricio, unas personas llegan y los llevan al otro lado del río. De esta forma los invitan a trabajar como parte de una actividad criminal en Los Caparros”, detalló el coronel Jorge Cabra, comandante de la Policía de Antioquia. Los criminales les habrían propuesto un millón de pesos para que hicieran parte de sus actividades ilícitas.
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Ramírez fue encontrado en buenas condiciones de salud física, pues solo presentó desorientación geoespacial. “Esta es una de las formas de reclutamiento ilícito. Son personas que no conocen las jurisdicción y son asaltados en su buena fue, es una de las hipótesis”, explicó Cabra.
La familia de Ramírez dijo a Noticias Caracol fue la liberación del joven se dio porque padece de una discapacidad en su columna, en la que tiene más de 30 tornillos implantados tras una cirugía para corregir una lesión.
Los Caparros son una organización criminal que se disputa el territorito del bajo Cauca antioqueño y el sur de Córdoba con el Clan del Golfo. Esas zonas hacen parte de un corredor estratégico para las organizaciones relacionadas con el narcotráfico, la minería ilegal y otras actividades ilícitas. La historia de esta organización criminal se remonta a finales de los años 90, cuando la expansión paramilitar empezaba a gestarse.
Los Caparros, según declaraciones de Carlos Mario Jiménez Naranjo, alias Macaco, fueron creados por él en 1996, luego de que le ordenara a Virgilio Peralta Arenas, alias Víctor Caparrapo –llamado así porque era oriundo de Caparrapí (Cundinamarca) –, reclutar a varios hombres de ese municipio para integrar el grupo paramilitar que, en ese momento, se llamó Caparrapos, nombre que cambiaron las autoridades en 2019 para evitar la estigmatización contra los habitantes de ese pueblo cundinamarqués.
El inicio de la desmovilización de las Farc, en 2017, cambió el panorama: Los Caparros rápidamente se expandieron en los territorios que fueron abandonados por los frentes 18 y 36 de esa guerrilla.
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