Al menos 1.548 personas están confinadas en una zona rural del municipio colombiano de Nuquí, en el departamento del Chocó (noroeste), debido a los combates entre grupos armados al margen de la ley, informó hoy la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA).
"Desde hace aproximadamente un mes, las disputas territoriales entre grupos armados vinculados al crimen organizado y grupos armados no estatales (...) han causado el confinamiento de la menos 1.548 personas pertenecientes a seis comunidades indígenas", aseguró la OCHA en un comunicado.
Son 331 familias indígenas de la etnia embera que se encuentran en "riesgo de desplazamiento masivo" si se prolonga la situación y persisten "los vacíos en la respuesta".
Estas comunidades también han recibido "amenazas" y sufren la "presencia de municiones sin explotar", además de la existencia de "riesgo de reclutamiento infantil", agrega la OCHA.
El selvático departamento del Chocó, donde se encuentra Nuquí, es uno de los más pobres y abandonados de Colombia.
En la zona delinquen varios grupos armados al margen de la ley como bandas criminales nacidas tras la desmovilización de los paramilitares; la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (Eln) y grupos dedicados puramente al narcotráfico y el contrabando.