Nueve años después de la tragedia, los gramaloteros luchan por consolidar su territorio

Funcionarios de la alcaldía de Gramalote, Norte de Santander, dicen que las obras aún no están terminadas.

* Redacción Nacional
17 de diciembre de 2019 - 09:49 p. m.
En la vereda Miraflores se entregaron 850 viviendas desde el 2016 donde los residentes ya cuentan con agua potable y manejo de residuos. / Cortesía
En la vereda Miraflores se entregaron 850 viviendas desde el 2016 donde los residentes ya cuentan con agua potable y manejo de residuos. / Cortesía

Los habitantes de Gramalote, Norte de Santander, llevan nueve años en el proceso de reconstrucción de su municipio. El 17 de diciembre de 2010, un monumental aguacero saturó el terreno sobre el que estaba construido el pueblo y la tierra se lo llevó todo.  Los habitantes quedaron en medio del barro y las casas destruidas.

Los más de 3.000 habitantes del pueblo,  fundado hace 150 años, tuvieron que evacuar de afán y posteriormente ser reasentados en la vereda Miraflores.

“El municipio estaba asentado sobre un depósito de coluviales, que es la acumuluacion de material suelto altamente susceptible a movimientos en masa”, según explicó el Fondo de Adaptación. Esta situación junto a la deforestación y al fenómeno de La Niña, obligó a los gramaloteros a evacuar el casco urbano.

También le puede interesar: Gramalote, un pueblo que se tragó la tierra​

“Estábamos en la parte baja en la vereda Jácome, que fue donde ocurrió la tragedia. Ahora estamos en la parte alta, a 11 kilómetros de la vía gramalote”, dijo León David Peñaranda, funcionario de la alcaldía de Gramalote, y quien estuvo presente durante la tragedia.

“No nos gusta hablar de la tragedia, pero puedo decirle que somos arraigados a nuestras tradiciones. La montaña nos dijo, ‘se van o los saco’, por lo que más que un proceso de recuperación material, es reconstruir nuestra crianza en otro territorio”.   

 

 

En la vereda Miraflores se entregaron 850 viviendas desde 2016 donde los residentes ya cuentan con agua potable y manejo de residuos.“Según nos informó el Fondo de Adaptación, hace falta por construir 150 viviendas, las cuales deben ser entregadas en agosto de 2020”, dijo a El Espectador José Tarcisio Celis, alcalde municipal de Gramalote, quien añadió que la construcción de la casa de la cultura y del adulto mayor ya están contratadas para construcción, mientras que proyectos como el polideportivo y la casa campesina, aún están pendientes de contratación. “El colegio ya está terminado, falta el hospital y la construcción de la iglesia que puede llegar a costar 12.000 millones”.  

Celis explicó que las vías de acceso al municipio están siendo terminadas. “Se está desarrollando el tramo 1 y 2 con infraestructura muy buena”.  Sin embargo, actualmente  las carreteras que lo unen con Cúcuta, capital departamental, y con las pequeñas localidades de Santiago y Sardinata fueron cerradas por fracturas en varios tramos.

También le puede interesar: La tragedia después de la desaparición de Gramalote

A pesar de los avances, el alcalde considera que hubo retrasos en la entrega de proyectos. “Considero que hubo problemas con el fondo y la empresa Unión Temporal Gramalote. Tal vez la empresa no tenía un colchón económico suficiente para entregar las obras en 2017”. Lo mismo considera Peñaranda, quien explicó que la vereda Miraflores ya está habitada en un 60 %. “Nueve años es mucho tiempo por lo que esto ha sido difícil. En teoría nos hablaban de tres años de reasentamiento, luego cinco, y nueve años después no tenemos todo listo”. 

 

Gramalote enfrenta un nuevo reto: activar la economía en la región. “El Fondo va a entregar $5.000 millones para fomentar el fortalecimiento económico. El municipio se caracteriza por la compra de café y otros productos agrícolas. También hay ganadería y caña”. Peñaranda explicó que en la vereda Jácome solían realizar su actividad comercial con los campesinos de las regiones más cercanas.

Sin embargo, por la tragedia se rompieron estos vínculos económicos que son importantes para el sostenimiento de la población. “El campesino no llega a nuestro pueblo como quisiéramos. No hemos podido hacer la ferretería, la venta de dulces o de cualquier negocio. Estamos a la expectativa para ver cómo crece este nuevo territorio”.  

De acuerdo con un informe revelado en noviembre por la Contraloría, aún falta terminar 135 viviendas que debían entregarse el pasado 8 de octubre. Tampoco se ha concluido el hospital que se prevé estaría terminado el 30 de enero de 2020 para que pueda ser dotado en marzo y entregarse en abril.

Por * Redacción Nacional

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta política.
Aceptar